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El alcalde de Barakaldo dice que le repugna la corrupción política y defiende su honestidad

García Alonso recibe la 'makila' de alcalde de manos del edil Jesús María González Suances
El alcalde de Barakaldo, Alfonso García Alonso (PSE), siente "especialmente" repugnancia por la corrupción política "venga del partido que venga". Así lo asegura en un nuevo artículo en su blog en el que, bajo el título 'Cuestión de valores', admite el "grave problema de credibilidad en los políticos" generado por la sucesión de escándalos, aunque sostiene que "la mayoría de los políticos", comenzando por sí mismo, son honestos. "En mi caso, nadie podrá decir que a lo largo de mi trayectoria municipal no me haya comportado con honestidad. Nunca he aprovechado mi cargo para fines espurios y así seguirá siendo", afirma García Alonso.

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Artículo de Alfonso García Alonso
Cuestión de valores

Si hay algo que me repugna especialmente es la corrupción política, venga del partido que venga. Las últimas semanas están resultando muy prolíficas en cuanto a noticias sobre corrupción se refiere, y la sombra de la sospecha se extiende incluso sobre destacados dirigentes nacionales. No seré yo quien juzgue si estas personas son culpables (para eso está la justicia), pero más allá de las consecuencias judiciales que se deriven de estos casos, resulta evidente que la concatenación de presuntas corruptelas ocasiona un grave problema de credibilidad en los políticos.

Muchos ciudadanos y ciudadanas han dejado de creer en sus representantes. La confianza en la política se diluye y va a ser difícil recobrarla. Por mucho que la mayoría de los políticos seamos honestos y actuemos dentro de la legalidad, la percepción ciudadana empieza a ser precisamente la contraria. Y hasta cierto punto es normal cuando tan altos dirigentes han podido enriquecerse de forma ilícita.

Es el momento de los hechos, no de simples promesas. Las palabras grandilocuentes, muy habituales en política, deben estar siempre avaladas por la realidad. En mi caso, nadie podrá decir que a lo largo de mi trayectoria municipal no me haya comportado con honestidad. Nunca he aprovechado mi cargo para fines espurios, y así seguirá siendo. De eso pueden estar seguros los barakaldeses y barakaldesas.

Es una cuestión de valores. Ya lo dije en el pleno de toma de posesión como alcalde el pasado 8 de julio: nada más me honraría que mis convecinos y convecinas me recordarán en el futuro como a Julián Zugazagoitia, a quien con motivo del 25 aniversario de su fallecimiento Juan Iglesias describió de la siguiente manera en el año 1965, desde el exilio de Baiona y a través de Radio Euzkadi:
“Así era Julián Zugazagoitia. No vino al socialismo ni sirvió a la República para hacer carrera. De la vida pública, como de la vida privada, tenía un limpio concepto”.