Los presuntos hechos tuvieron lugar el día de Navidad en la vivienda que la mujer compartía con varias personas en el municipio vizcaíno de Barakaldo. Según la víctima, había regresado a casa después de celebrar la fiesta navideña y su compañero de piso le siguió hasta la habitación, donde forcejeó con ella y la agredió sexualmente en contra de su voluntad.
La llamada a su teléfono móvil de un familiar hizo que el agresor depusiera su actitud durante un breve espacio de tiempo que ésta aprovechó para informar de lo que estaba sucediendo. Poco después, una persona allegada a la víctima acudió a la vivienda. Tras dar aviso a la Ertzaintza, la patrulla que acudió al lugar se encontró con el presunto agresor sexual en la escalera cuando trataba de huir y procedió a su detención por un delito contra la libertad sexual.