El equipo de gobierno del Ayuntamiento ha asegurado este jueves que un estudio elaborado por la Fundación Etorkintza por encargo del Gobierno Vasco determina que no es necesaria la creación de una sala de consumo supervisado para drogodependientes, o ‘narcosala’, en ninguno de los municipios de la Margen Izquierda, a pesar de que el Ayuntamiento y el propio alcalde habían solicitado su creación, y señala que son más urgentes y convenientes la puesta en marcha de otros recursos y programas de mayor contenido social-laboral para este colectivo.
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Un estudio del Gobierno vasco determina que no es necesaria una sala de consumo supervisado para drogodependientes en la margen izquierda
> El informe, encargado a la Fundación Etorkintza, ha sido presentado hoy en Barakaldo y valora la conveniencia de otros recursos y programas
Un estudio encargado por el Departamento de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno vasco a la Fundación Etorkintza determina que no es necesaria una sala de consumo supervisado para drogodependientes con el objetivo de dar cobertura a los ciudadanos de la margen izquierda vizcaína. El informe valora con mayor urgencia la conveniencia de otros recursos y programas de mayor contenido social-laboral para este colectivo.
El informe, bautizado como ‘Estudio de campo y análisis de la realidad del colectivo de drogodependientes en la margen izquierda’, ha sido presentado hoy en Barakaldo en un acto que ha contado con la presencia del alcalde, Tontxu Rodríguez, la directora de Drogodependencias del Gobierno vasco, Celina Pereda, y Begoña Río, psicóloga de Etorkintza.
Con las conclusiones del estudio sobre la mesa, se desecha la posibilidad de implantar una ‘narcosala’ como la ubicada en Bilbao en cualquiera de los cuatro municipios de la margen izquierda -Barakaldo, Santurtzi, Portugalete y Sestao-, algo que se ha reclamado en varias ocasiones.
Tal y como ha recordado Tontxu Rodríguez, el pasado 19 de julio el Partido Popular de Barakaldo solicitó al alcalde que pidiera al Gobierno vasco una sala de consumo supervisado destinada a los toxicómanos de la ciudad. Ya entonces, no se trataba de un asunto novedoso. En 2007, el propio alcalde realizó una petición similar al Departamento de Asuntos Sociales del Gobierno vasco, que por aquella época estaba dirigido por Javier Madrazo.
ENTREVISTAS Y ESTUDIO DE CAMPO
“Nada se hizo entonces por saber si realmente este servicio era realmente necesario, pero desde la entrada del nuevo Ejecutivo socialista del lehendakari Patxi López las cosas cambiaron y nos pusimos a trabajar con Celina Pereda, directora de Drogodependencias, para intentar dar respuesta a esta problemática no sólo en Barakaldo, sino en toda la margen izquierda, ya que creemos que se trata de una cuestión que hay que abordar desde el punto de vista de toda una comarca”, ha explicado Rodríguez.
Mientras tanto, el pasado 29 de julio el Pleno Municipal trató una moción en este sentido y, durante el turno de intervenciones, la delegada del área municipal de Prevención de Drogodependencias, Dulcina Pereiro, pudo anunciar que el Gobierno vasco estaba a punto de encargar un estudio para analizar a fondo el asunto.
Esta ardua investigación ha sido realizada en los cuatro municipios de la margen izquierda -Barakaldo, Santurtzi, Portugalete y Sestao- y ha tenido dos partes. Por un lado, se han realizado entrevistas semiestructuradas a las personas responsables de los recursos existentes y a los propios consumidores de drogas, fundamentalmente heroína y cocaína. Y, por otro, se ha efectuado una observación de campo para conocer en la medida de lo posible cuál es la magnitud del problema y la situación real de estas personas.
EQUIPO DE EXPERTOS
El objetivo del estudio no era sólo determinar si era o no necesaria una sala de consumo supervisado similar a la que actualmente existe en Bilbao, sino detectar las necesidades y demandas de la población drogodependiente y de los diferentes recursos existentes, así como caracterizar el perfil y la situación de estas personas en la margen izquierda. Es decir, conocer sus características socio-demográficas, hábitos de consumo, grado de integración social, estado de salud, calidad de vida, volumen de población drogodependiente en tratamiento y servicios sanitarios y sociales utilizar.
En el trabajo, asimismo, se describen los servicios de atención actualmente existentes y los servicios utilizados por los drogodependientes de la margen izquierda. Se trata del primer estudio de este tipo que se hace en la comarca y ha obligado a la Fundación Etorkintza ha realizar un gran esfuerzo. De hecho, el equipo de trabajo ha estado formado por los educadores Manolo López y Janire Gazopo y la psicóloga Begoña Río, quienes han recogido información, han observado ‘in situ’ la situación de los drogodependientes y los recursos existentes y han desarrollado entrevistas. Se trata de profesionales conocedores del perfil de población, del campo de intervención y de los propios recursos, lo que ha facilitado el trabajo y la orientación del mismo.
Tontxu Rodríguez, en este sentido, ha querido aprovechar la ocasión para mostrar su agradecimiento al Gobierno vasco y a la Fundación Etorkintza por haber sido capaces de ‘bajar a la arena’ y acercarse a un mundo muchas veces desconocido.
