El área municipal puso el asunto en conocimiento de la Fiscalía para que se dilucidara si se ha cometido algún delito y acaba de llegar la notificación de que se ha abierto una investigación. Al margen de las acciones que se han tomado desde el área y la Policía Local, también se ha transmitido la misma información a la Diputación. Es decir, se han tomado todas las medidas necesarias para que ninguna infracción o delito quede impune.Cabe recordar que el pasado 23 de noviembre el área de Desarrollo Sostenible y Medio Natural de Barakaldo decretó la clausura inmediata del local. El cierre se debió a que la actividad se ejercía “sin contar con título habilitador para su funcionamiento y al objeto de prevenir molestias a los vecinos colindantes y/o riesgos a las personas o sus bienes”.
Posteriormente, el 10 de diciembre la Policía Local acudió al local en cuestión a hacer efectiva la orden de cierre, ya que aún se encontraba en funcionamiento pese a haber expirado el plazo para que abandonara la actividad. De esta manera, se puso fin a una actividad irregular que estaba causando molestias a los vecinos y vecinas de Lutxana.
En los diferentes informes policiales queda claro que, antes de clausurar el local, el responsable del local tiene la documentación en regla de los animales. El ‘chipeado’ de los perros permite, además, hacer un seguimiento de los mismos. No obstante, tres de los canes y un guacamayo presentes en el local son propiedad suya y, por tanto, no estaban destinados a esa actividad.
La documentación en relación a las acciones realizadas con otras administraciones está en el área de Desarrollo Sostenible y Medio Natural a disposición de Elkarrekin Barakaldo, que pidió una copia. Sin embargo, ningún concejal de la formación ha acudido aún a por la misma.
