Las fiestas de Barakaldo se han trasladado al turno de tarde-noche. Aunque este lunes ha sido no laborable en la anteiglesia, muchos vecinos han tenido que trabajar y eso se ha visto reflejado en la calle, en donde la fiesta, más allá de los juegos infantiles, ha tenido su momento más intenso en las horas de la tarde, cuando además empezaba a aflojar un poco el calor intenso sufrido en las horas centrales del día. La actividad se ha notado de manera especial en torno al parque de los Hermanos, en donde se encuentran las 'txosnas'. Si a la hora de comer, el calor era más que sofocante sin una gota de aire y pocos se arriesgaban a estar en la calle, avanzada la tarde se llenaba el recinto tanto en las terrazas de 'txosnas' como en los espectáculos. Por ejemplo, eran cientos las personas que asistían y participaban cantando en Los Hermanos en el concierto 'Musikantu', con el coro barakaldés KantArte, la coral Orpheo y la Banda de Música de Areatza, muy aplaudida tanto por sus canciones populares, como las bandas sonoras de películas y clásicos del pop y el rock. Por su parte, el muy poco frecuente jazz en Barakaldo se apuntaba un éxito con la actuación del cuarteto del percusionista local Aritza Castro en la calle San Antolín. En Herriko Plaza, tras el siempre multitudinario toro de fuego, alrededor de 3.000 personas asistían, entre risas y aplausos, al espectáculo de magia del televisivo Yunke, organizado como acto central de la jornada.
