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Elecciones | La candidata del PNV arremete contra el PSE por "gobernar a espaldas a la gente"

La candidata del PNV a la alcaldía de Barakaldo, Amaia del Campo, ha acusado al PSE en el Ayuntamiento de "gobernar a espaldas a la gente" y ha defendido que la anteiglesia "se merece un buen Gobierno" con "participación, transparencia y proximidad" así como "buena gestión". En su blog, Del Campo, en clara referencia a los socialistas, afirma que "no debería verse como un potencial problema que un vecino quiera tomar la palabra en el pleno, no debería tomarse como una ofensa una moción presentada por un grupo político y no es una amenaza intolerable" el debate sobre alternativas". "Por desgracia, éste es el Barakaldo al que nos quiere acostumbrar el PSE de Barakaldo y yo me resisto a aceptar que nuestro pueblo siga siendo así", sostiene la aspirante nacionalista.



Artículo de Amaia del Campo
Barakaldo se merece un “buen gobierno y una buena gestión”

Hablamos a menudo de Buen Gobierno, relacionando directamente este concepto con el de la Gobernanza, es decir, con la participación, la transparencia y la proximidad. Es cierto que el Buen Gobierno es un gobierno que necesariamente ha de trabajar todo esto de un modo sincero y sobre todo, eficaz. Pero la gestión pública, el Gobierno de lo público ha de conllevar además una buena gestión y este es un concepto más amplio que el anterior.

Los responsables públicos tenemos la obligación de trabajar por un modo de hacer cercano, transparente y participativo. Debemos hacerlo, porque sin ello difícilmente podríamos ejercer una gestión de calidad y porque para dar un buen servicio público, debemos tener en cuenta la opinión de las personas que utilizarán estos servicios, pero además porque estas personas pueden y deben ayudarnos no solo a valorar los servicios, sino también a definir cuáles deben ser y cómo los prestamos.

¿Qué pasa cuando hacemos una gestión de espaldas a la gente? Pues que en muchas ocasiones cometemos errores, provocamos fallos en la gestión de los recursos públicos que cuestan dinero de todas y todos, por no tener en cuenta cuales son las necesidades y prioridades de las personas. Esto supone un costo, porque los recursos no son infinitos, y por lo tanto, perdemos la oportunidad de hacer otras cosas o las mismas cosas pero de un modo más eficiente.

Quien gobierna de espaldas a la gente cada día se aleja más de las personas a las que representa, esta situación se agrava con el tiempo y la desconfianza de la gente respecto de los cargos políticos aumenta, los desencuentros se agravan, la sensación de lejanía y de desapego aumenta y llega un momento en el que estos gobernantes ven a sus convecinos como un potencial problema o un potencial foco de conflicto y entonces ya, abrirse y escuchar, se vuelve imposible.

Barakaldo necesita ser bien gestionado, una buena gestión que saque adelante proyectos, que ponga en marcha y optimice servicios públicos, que responda a las necesidades de la ciudadanía. Hacer esto, no es una tarea fácil, pero si lo hacemos escuchando, teniéndonos en cuenta y haciendo partícipe a la ciudadanía y entidades sociales, será sin duda mucho más sencillo.

Porque un vecino/a que quiere tomar la palabra en el pleno no debería verse como un potencial problema, porque una moción presentada por un grupo político no debería tomarse como una ofensa que hay que bloquear, y porque que el debate sobre alternativas no es una amenaza intolerable. Por desgracia, este es el Barakaldo al que nos quiere acostumbrar el PSE de Barakaldo, yo me resisto a aceptar que nuestro pueblo siga siendo así. Porque Barakaldo se merece un “Buen Gobierno”.