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Irantzu Rojo | cantautora
“En Barakaldo los bares se la juegan para poder ofrecer un concierto”


por Mariela Estévez Campos | Fotos cortesía de Irantzu Rojo

Irantzu Rojo (1991), nacida en Barakaldo un día de Navidad, subió por primera vez a un escenario a los 10 años en Villarcayo, el pueblo en el que veraneaba con su familia. Reacia a aceptar etiquetas, canta pop-rock pero también piezas populares en euskera, boleros o cualquier canción que le permita expresar lo que siente, compuestas en su mayor parte por ella misma. Aunque ha recibido clases de canto y guitarra, se reconoce básicamente autodidacta y resalta los beneficios del autoaprendizaje frente a la formación reglada. Alaba la labor de apoyo a los músicos locales de Barakaldo Música pero critica las trabas que el Ayuntamiento de Barakaldo pone a los bares para ofrecer música en directo.
Compagina su actividad musical con un trabajo de educadora infantil y monitora de tiempo libre en el que también apuesta por la música como método para ampliar la capacidad de retentiva y atención de los niños. Ganadora del certamen Veo Veo de Castilla-León, quedó segunda en la edición nacional de la competición organizada por Teresa Rabal. Triunfadora en el Euskal Herriko Haur Kantari Txapelketa de 2007, ha participado en los concursos televisivos ‘El Número Uno’ y ‘La Voz’.


Pregunta. ¿Qué diría si tuviese que presentarse a sí misma?
Respuesta. Me resultaría bastante complicado explicar de una manera ordenada y detallada el tipo de persona que soy. Soy una chica sencilla que busca ser feliz y disfrutar los días al máximo con las cosas que me divierten y una de las mejores sensaciones del mundo, es coger mi guitarra y expresar mis sentimientos con la voz.

P. Lleva desde los 10 años cantando como solista. ¿Todavía no se ha cansado?
R. Creo que nunca podría cansarme de cantar y componer. Al fin y al cabo, la música es lo que hace que consiga evadirme de todo y sentirme tranquila y viva.

P. ¿Cómo llegó al mundo de la música?
R. Siempre ha formado parte de mi mundo. En la vida hay cosas que resultan agradables y para mí cantar era muy fácil. Veía a esos grandes cantantes en escenarios enormes con miles de personas escuchándoles y sentía envidia, quería sentir esa sensación que para mí era tan desconocida. Y de la manera más tonta, un día como otro cualquiera, decidí arriesgarme y luchar por vivir esa experiencia.

P. ¿Era el alma musical de las fiestas del colegio o del instituto?
R. Nunca he sido ni más ni menos que nadie. Sí que es verdad que la música me ha valido para llevar a cabo un montón de actividades divertidas, para perder la vergüenza y para creer en mí misma. A día de hoy todavía siento el apoyo de muchos de mis profesores de cuando era pequeña y no hay nada más agradable que sentirte apoyada por la gente que te ha visto crecer.

P. ¿Qué opinaba su familia de su vocación musical?
R. Mi familia siempre me ha dado todo el apoyo del mundo, a veces quizás más de lo debido. Siempre he tenido una cosa muy clara y es que debo compaginar mi pasión por la música con mis estudios, con mi tiempo libre, y esa fue la única condición que me pusieron en casa.

P. ¿Sus padres son músicos?
R. No

P. ¿Es alumna de conservatorio o se ha formado al margen de los cauces oficiales?
R. He recibido clases de guitarra y canto en un par de academias y clases particulares con sopranos y tenores, pero nunca en el conservatorio. Creo que de esta manera recibes una formación más personalizada y adaptada a ti. Aunque también considero esenciales los beneficios del autoaprendizaje.

P. Además de música es usted educadora infantil. ¿Lleva la guitarra a sus clases?
R. Soy educadora y monitora de tiempo libre con niños y, sí, se podría decir que también en el ámbito profesional vivo pegada a mi guitarra. Es fácil de entender teniendo en cuenta que creo en la educación y en la música por encima de todas las cosas. Es maravilloso ver cómo los niños amplían su capacidad de retentiva y atención utilizando la música como método.

P. ¿Cómo se pasa de cantar la canción de ‘Ghost’ en su primera intervención pública a componer y cantar rock?
R. Odio las etiquetas y tener que catalogar el tipo de música que hago. Yo canto las canciones que siento y puede que dos temas totalmente opuestos en lo que a género se refiere me permitan expresarme. 'Unchained melody' siempre me ha parecido un tema brutal y a día de hoy sigue sonando en alguno de mis conciertos.

P. Compone usted sus propios temas. ¿En qué se inspira para ello?
R. Suena a tópico, pero desde luego no hay nada mejor que la propia experiencia para componer y contar historias. A veces la inspiración llega en los mejores momentos, otras veces son los peores los que ayudan a crear las letras más bonitas. Pero se trata de contar tus historias y hacérselas llegar a la gente.

P. ¿De que tratan sus canciones?
R. Felicidad, tristeza, amor, desamor, alegrías, penas, deseos, miedos, historias que empiezan, historias que acaban, todo tiene cabida en mis canciones, siempre y cuando lo sienta de verdad.

P. ¿Euskera o castellano?
R. Euskera, castellano, inglés o italiano. No limito mi música a ningún idioma. Cuando compongo y pienso en contar una historia lo hago en el idioma que me sugiere aquello que quiero contar. Si canto canciones de otros artistas generalmente lo hago en el idioma en la que el tema fue compuesto originalmente, aunque sí que es verdad que a veces, depende de dónde vaya a cantar, adapto las canciones al idioma que me interese, con el mayor de los respetos hacia la canción original.

P. ¿Quiénes son sus músicos o sus grupos de referencia?
R. No tengo ninguno. Escucho música de todos los géneros porque cada tipo de música te aporta algo diferente.

P. Se quedó a las puertas del concurso ‘El Número Uno’. ¿Cómo fue la experiencia?
R. Cuando participo en algún concurso soy totalmente realista y sé lo que puede y lo que no puede pasar. En ‘El Número Uno’ conocí a gente maravillosa como Roko o Edu Cayuela, con el que tuve la oportunidad de actuar. También me quedé en las puertas de ‘La Voz’, donde llegué a grabar las audiciones a ciegas, aunque tampoco fui muy afortunada. En ese programa la suerte fue conocer a Neus Ferri, una gran amiga. Sin duda para mí lo mejor de este tipo de concursos es la gente que te puedes encontrar, por lo que recuerdo con gran cariño cada una de estas experiencias.

P. ¿Qué opina del ambiente musical barakaldés?
R. Tengo una opinión agridulce en cuanto a ese tema. En Barakaldo se requiere licencia de café-teatro para actuar. Yo suelo ofrecer acústicos en bares y esto supone un verdadero problema. Los bares se la juegan para poder ofrecer un concierto aunque sea en un horario en el que no molestes a nadie. Por otro lado, me parece que desde Barakaldo Música se hace una buena labor, sobre todo en cuanto a facilitar las relaciones entre grupos locales, pero creo que el verdadero trabajo pendiente sería facilitar a los músicos poder ofrecer conciertos más libremente. Otra de las cosas que echo de menos en Barakaldo es la costumbre de reunirse en bares para potear y cantar canciones tradicionales.

P. ¿Por qué son tan pocas mujeres entre los más de 100 grupos que existen en la anteiglesia?
R. Para nada creo que ser mujer en el mundo de la música sea una dificultad añadida. Hace años pudo ser, pero hoy en día nadie te cierra una puerta por tu sexo. Con ganas, esfuerzo y trabajo da igual que tu nombre se conjugue en femenino o en masculino.

P. ¿Se ha planteado salir fuera para hacer carrera?
R. Salgo cada vez que mi trabajo o mi pasión lo requieren, pero la verdad es que me siento muy de aquí y es aquí donde me gustaría poder trabajar toda la vida, aunque realmente nunca se sabe dónde puedes acabar.

P. ¿Qué está haciendo en estos momentos?
R. Dedico todo el tiempo posible a componer y a preparar futuros conciertos o actuaciones. El hecho de participar en concursos y firmar contratos de exclusividad artística me ha tenido un poco atada, por lo que me pasado un tiempo ordenando ideas y escribiéndolas.

P. ¿Cuáles son sus siguientes proyectos?
R. Siempre hay alguno en mente. Ahora mismo estamos a la espera de confirmación de un acústico en Barakaldo pero por el momento no se puede decir mucho más.