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La Diputación subvenciona tres centros ocupacionales de la Margen Izquierda y Zona Minera


Los centros subvencionados son el Taller Usoa, el Taller Ranzari Lantegia y la Mancomunidad pro deficientes psíquicos Gallarreta
La Diputación Foral de Bizkaia ha acordado subvencionar con 1,3 millones de euros tres centros ocupacionales de personas con discapacidad de la Margen Izquierda y la Zona Minera, entre ellos el Taller Usoa Lantegi -que dispone de 62 plazas en el centro ocupacional y 53 plazas de bajo rendimiento en el centro especial de empleo-, para colaborar en el mantenimiento de servicios y recursos que facilitan la integración social de las personas con discapacidad.

Nota de prensa
1,3 MILLONES DE EUROS PARA 3 CENTROS OCUPACIONALES DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD
La Diputación Foral de Bizkaia subvenciona con 1,3 millones de euros los centros ocupacionales y los centros especiales de empleo de Taller Usoa Lantegi, de Taller Ranzari Lantegia y de la Mancomunidad pro deficientes psíquicos de la Zona Minera Gallarreta


Los centros ocupacionales y los centros especiales de empleo tienen como finalidad promover la autonomía personal y la integración social de persons con discapacidad intelectual mediante la realización de actividades socio-laborales.

El Taller Usoa Lantegia dispone de 62 plazas en el centro ocupacional y 53 plazas de bajo rendimiento en el centro especial de empleo.

El Taller Ranzari Lantegia gestiona un centro ocupacional de 51 plazas y un centro especial de empleo con 42 plazas.

La Mancomunidad pro deficientes psíquicos de la Zona Minera Gallarreta mantiene 31 plazas en el centro ocupacional y 11 plazas de bajo rendimiento.


El objeto de estos convenios es colaborar en el mantenimiento de servicios y recursos que facilitan la integración social de las personas con discapacidad. En muchos casos, personas con discapacidad pueden llegar a integrarse en el mercado laboral tras haber pasado por un proceso de formación en centros especiales de empleo y haber adquirido las habilidades necesarias para desenvolverse en un entorno normalizado.

Hay otras muchas personas que, en función de su situación personal, no llegan a ese objetivo pero, gracias a las actividades ocupacionales y al empleo protegido, alcanzan un mayor grado de autonomía, mejoran sus habilidades sociales y, en definitiva, logran una mayor integración en la sociedad.