Sólo una empresa se ha interesado por el contrato. Estudios y Obras Recalde SL se ha llevado, en consecuencia, la adjudicación y tiene medio año para entregar la obra, hasta el 28 de diciembre de 2024. Durante este periodo, los peatones tendrán que dar un rodeo de unos 250 metros para subir o bajar de la N634.
El desnivel que se salva con el ascensor es de 4,7 metros. El aparato eléctrico tendrá capacidad para ocho personas. Además, se acondicionará una rampa pero el Ayuntamiento admite que incumplirá la normativa de accesibilidad. "Si fueramos a pendientes reglamentarias no habría superficie para construir la rampa con los descansillos intermedios requeridos", señala el documento técnico.
Extractos del proyecto
El proyecto contempla la instalación de un ascensor exterior panorámico que resolverá los problemas de accesibilidad entre Burtzeña y Munoa y, por tanto, mejorar la calidad de vida de los usuarios.
El ascensor estará formado por una estructura de perfiles laminados acero inoxidable y un cerramiento de vidrio transparente. La cabina será a su vez de vidrio transparente.
El ascensor se situará junto a la cota inferior de la escalera. Desde la cota superior del terreno se colocará una pasarela de acceso hasta castillete. El ascensor salvará un desnivel de 4,65 m aproximadamente, desde la cota +17,55 hasta la cota de +22,20 m.
El castillete dispondrá de una cubrición volada sobre cada puerta de acceso al ascensor.
Además de la instalación del ascensor, se plantea realizar una rampa en la zona ajardinada junto a la escalera para salvar el desnivel. Dada la superficie disponible y la orografía del terreno es inviable construir una rampa cumpliendo completamente los criterios de accesibilidad, por tanto, la rampa se adaptará al terreno existente y servirá de apoyo principalmente en los momentos en los que el ascensor pueda sufrir alguna avería. Se indica que existe un itinerario accesible por la calle Munoa rodeando la manzana hasta la plaza Burtzeña. Se indica el recorrido en azul en la siguiente foto:
Se deberá cortar la escalera en anchura para permitir el paso para la rampa. La rampa, junto al muro existente de límite del colegio tendrá una anchura de 1 metro para permitir que la escalera tenga una anchura de 2 metros. Se considera importante mantener la anchura de la escalera en 2 m en todo el trazado debido al flujo de personas que la usan. Cuando la rampa coincide encima del jardín se amplía a 1.50m.
Se deberán realizar trabajos de adaptación del entorno urbano.
Es preciso derribar el muro derecho que sujeta la escalera, en sentido ascendente, para cortarla, así como parte de la propia escalera. Se observa que la escalera no está en buen estado, presenta hundimientos. Por ello, es posible que la escalera no se mantenga al cortarla y caiga, se prevé la posibilidad de construirla nuevamente incluyendo la losa y el muro que la sustenta. Se derribará también el cierre de albañilería del pasadizo subterráneo y parte de la estructura de hormigón para situar el ascensor.
Los pavimentos de los embarques y de acceso a las pasarelas se reharán para adaptarlos a la normativa vigente de accesibilidad.
Se realizará una revegetación adaptada según la vegetación previa en cada zona que se interviene.
Varias instalaciones enterradas se verán afectadas y habrá que modificar su trazado y adaptarlas a la intervención, entre ellas saneamiento, abastecimiento de agua, telefonía y alumbrado público. Existe una red de gas en la zona, que en principio se evitará afectarla, pero no se podrá saber con certeza si es necesario desplazarla hasta conocer su profundidad una vez se esté en obra. Se canalizará una red de telefonía aérea existente mediante una zanja atravesando el área de intervención. Será necesario conectarse al suministro eléctrico para la instalación del ascensor que se canalizará de manera subterránea o aérea desde la cota inferior de la calle hasta el aparato eléctrico.
Tanto la estructura vertical del ascensor como la pasarela serán iluminadas por medio de luminarias que garanticen la perfecta visibilidad de los usuarios y les proporcionen la necesaria sensación de seguridad.
Se modificará la iluminación actual en la calle peatonal desde el ascensor hasta la cota inferior sustituyendo las cuatro pantallas existentes por otros modelos.
El ascensor será suministrado, colocado y puesto en marcha por los técnicos de la empresa adjudicataria especializada, que también se encargarán de la colocación de los armarios de protección y control y de todos los cableados. El suministro incluye también la garantía de los ascensores hasta 2 años después de su recepción y puesta en servicio, de acuerdo con el Real Decreto 1/2007, de 16 de noviembre, de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios.
[…] Respecto a la rampa, tal como se ha dicho anteriormente, por la complicada orografía del terreno, su diseño no cumple algunos puntos de la normativa aplicable de accesibilidad, especialmente por las pendientes. Si fueramos a pendientes reglamentarias no habría superficie para construir la rampa con los descansillos intermedios requeridos. Además de eso, habría que construir grandes muros de hormigón armado con mucha altura para contener las tierras, la parte superior quedaría muy por encima de las personas, por lo que se podrían generar espacios peligrosos. Por otro lado, el alto importe económico que supondría dicha obra no sería proporcionado a la solución conseguida. Por todo ello se plantea una solución con pendientes que se van adaptando al terrero, desde el 16,5 % al 24 %.
El itinerario accesible está situado bordeando la manzana por la estación de servicio entre la calle Munoa y la calle Zumalakarregui hasta plaza Burtzeña, según se observa en la imagen adjunta.