Los agentes habían tramitado los permisos legales para poder realizar su acción, que consistía en repartir a los transeúntes un folleto en el que se muestran las imágenes de la alcaldesa, Amaia del Campo (PNV), y del teniente de alcalde Carlos Fernández (PSE), con la cifra del coste salarial que suponen, en contraste con la situación de pobreza y los recortes sociales que el Ayuntamiento aplica.
Pese a estar autorizado, los agentes requirieron los documentos de identidad a los activistas y además les alejaron de la zona del centro cultural, si bien estaban ya situados al otro lado de la calle Gernikako Arbola, fuera del área de acceso al espacio en donde se desarrollaba el mitin, rodeado de un extenso operativo policial.