Subsidiariamente solicitan dirigirse al parlamento autonómico para que incluya en los presupuestos para 2024 una partida para complementar las pensiones que no lleguen a tal cantidad. La misma moción ha sido ya tratada en 40 ayuntamientos y aprobada en algunos de ellos.
Dicha moción del MPEH viene avalada por los grupos municipales de EH Bildu y de ELKARREKIN-PODEMOS-IU, y apoyada por organizaciones sociales como BERRIOTXOA y sindicatos que componen la llamada “mayoría sindical”, así como por miles de firmas de ciudadanos y ciudadanas, cuya recogida aún no ha finalizado.
Argumenta Pensionistas la urgencia de tal medida ya que sólo en la C.A.V hay unas 170.000 pensiones por debajo de dicha cantidad, considerada mínima por la Carta Social Europea (firmada por el Estado Español) para poder llevar una vida digna. En Nafarroa hay otras 51.000 pensiones en la misma situación y en ambos casos la mayoría son mujeres “que no llegan a fin de mes o que tienen que elegir entre comer o calentarse en invierno”, siempre según Pensionistas.
Alegan en dicha moción, no sólo necesidad, sino también justicia; ya que si las pensiones son “un salario en diferido” la actualización de la pensión mínima debería estar relacionada con la actualización del SMI; sin embargo, aseguran que, si en 2011 la primera representaba el 93,7% del segundo, en 2023 la misma relación ha descendido al 72,5%. Dicho de otra manera: la pensión mínima ha perdido un 21% de poder adquisitivo más de lo que lo ha hecho el SMI.
Todo ello, -continúan- en un contexto de encarecimiento del nivel de vida, que impide a la persona pensionista confort en la vivienda, acceso a la misma, alimentación sana, atención y cuidados dignos… Añaden que la situación de la mujer pensionista es aún más grave ya que es fruto de la brecha de salarios y condiciones laborales arrastrada a lo largo de toda la vida laboral, y que, con los mismos parámetros, se hace más evidente al calcular la pensión.
Recordaron que con tales fines (1080€ x 14) han hecho movilizaciones a Madrid y a Gasteiz, obteniendo buenas palabras de la mayoría de los grupos parlamentarios. Sin embargo, esperan que en la aprobación de los presupuestos sus peticiones no sean atendidas, gracias a la aplicación del “rodillo” parlamentario que supone la mayoría PNV-PSE, que ya se ha pronunciado en contra y que previsiblemente rechazará las mociones presentadas por EH BILDU y ELKARREKIN-PODEMOS-IU, éstas sí, en sentido favorable a la petición.
No renuncia Pensionistas, sin embargo, a llamar a los grupos parlamentarios a una rectificación antes de que se voten los presupuestos; a tal efecto ha organizado otra manifestación el próximo sábado en la bilbaína Gran Vía (Plaza Elíptica) a partir de las 18 H. Similares iniciativas tendrán lugar en el resto de las capitales vascas en fechas próximas, (en Vitoria, el mismo día de la aprobación de presupuestos).
En otro orden de cosas recordaron que el colectivo BOPA por la defensa de la sanidad pública ha hecho un llamamiento para jueves a mediodía, frente al ambulatorio de Zaballa, para denunciar los recortes de horarios y servicios hospitalarios decretados por los responsables de Osakidetza, para el periodo navideño, al igual que lo hizo en verano. “…por descanso del personal, dicen; ¡como si las enfermedades tuvieran también vacaciones!” concluyen.
Al final intervino la coordinadora antieólicos de Encartaciones, y solicitaron firmas para la alegación que van a solicitar a la delegación de Industria.
Hicieron también un recordatorio de las reclamaciones individuales pendientes: hijos, (hasta el 6 de febrero de 2021) gastos indebidos por hipotecas y notarías… facilitaron hojas de reclamaciones; tras condenar una semana más el genocidio palestino, al que compararon con el bombardeo de Gernika, se dieron cita hasta el lunes 18 en la Herriko Plaza.
