Este “modus operandi” es, el que posibilitó, que una vez más, dos cuestiones que están en la calle y que preocupan a todos y sobre las que a priori no debería haber discusión, quedaran sin aprobarse.
El Pleno del mes de Septiembre del Ayuntamiento de Barakaldo, celebrado ayer día 29, arrancó con dos mociones del grupo municipal, para su debate en Pleno, las cuales, tenían como objetivo, en el primero de los casos, impulsar un protocolo anti-ocupación, y en el segundo, dotar de seguridad a un tramo de obras en San Vicente.
La primera de ellas tal y como explicó, su portavoz, Víctor Rodríguez, pretendía impulsar un nuevo protocolo anti okupación de actuación inmediata de la Policía Municipal en coordinación con los demás cuerpos policiales. El motivo no era otro que la referida ocupación de viviendas, “se traduce en un problema que no afecta únicamente a las personas propietarias de las viviendas, sino a toda la comunidad de vecinos, incluso al conjunto del barrio, generando problemas de convivencia y de inseguridad”, apuntaba.
De ahí que se pidiera al Ayuntamiento no mirar hacia otro lado y adoptar el protocolo correspondiente para poder atajar la delicada situación, sin embargo, el equipo de gobierno paso de puntillas sobre la cuestión para acabar votando en contra.
En el segundo de los casos, y a fin de mejorar la seguridad de un tramo de obras, en la Calle San Vicente, se solicitaba al equipo de gobierno que dictara las órdenes oportunas para exigir a la empresa adjudicataria de las obras, que adoptara las medidas necesarias que garantizaran la seguridad de los vecinos. No obstante sucedió lo mismo, una vez más el equipo de gobierno hizo gala de su tibiez, imposibilitando que la moción saliera adelante.
Por todo lo expuesto anteriormente, el PP de Barakaldo insta al equipo de gobierno a actuar con determinación y firmeza sobre las cuestiones que se plantean al en el Pleno y que necesitan su voto favorable para poder dar solución a los problemas de los vecinos.
