El sindicato enmarca este nuevo revés dentro de la política de ahorro, de falta de previsión y de falta de sustituciones del personal en periodo vacacional por parte del Departamento de Salud del Gobierno vasco. “Tras la situación de colapso que se vivió en la atención primaria el verano pasado, vuelve a poner encima de la mesa el mismo plan. El objetivo es claro: recortar derechos y privatizar servicios verano tras verano”, lamentan.
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El sindicato lleva años advirtiendo sobre el fuerte incremento en la actividad de atención primaria, un aumento de la carga de trabajo que no ha derivado en una mayor dotación de medios, algo que ha generado tensión entre la plantilla.
“La falta de personal en Osakidetza no es algo nuevo; sin embargo, en vez de realizar una apuesta clara por este nivel asistencial, Osakidetza apuesta por recortar derechos laborales, así como los derechos básicos de atención sanitaria de la ciudadanía”, lamentan.
La realidad que vivimos en el Servicio Público Vasco de Salud es alarmante, ya que o bien no existe una verdadera voluntad política para desarrollar un servicio sanitario de calidad, o bien existe una política destinada a recortar este derecho fundamental y así privatizarlo.
ELA se opone a cualquier medida que conlleve restringir los derechos de la ciudadanía, y exige que, de una vez por todas, Osakidetza haga una apuesta clara por la atención primaria, dotándola del presupuesto necesario que garantice los medios personales y materiales necesarios para llevar a cabo este tipo de atención a la ciudadanía, y que sea una atención de calidad.
