Celebrar este día Internacional de la Mujer es, sin duda un éxito social, conseguido por la lucha interminable e incansable de las mujeres por la consecución real de sus derechos y de la igualdad. Sin embargo, queda aún mucho camino por recorrer.
Según ONU Mujeres, a nivel mundial durante la pandemia se ha producido un aumento de la violencia contra las mujeres y las niñas, se han incrementado la tasa de absentismo y abandono escolar, la dedicación de mujeres y niñas a las responsabilidades de cuidados y la cifra de matrimonios infantiles. Este año de la pandemia, millones de mujeres están siendo abocadas a la pobreza extrema, pierden sus puestos de trabajo a un ritmo mayor que los hombres.
A nivel local, en el Módulo constatamos por una parte, la precarización de los trabajos de las mujeres, lo que aumenta la brecha de género, y por otra, las consecuencias psicológicas de su mayor presencia en la primera línea de la crisis, como trabajadoras, -remuneradas y no remuneradas-, del hogar y de la salud, en la atención y cuidado de las personas afectadas por el covid y/o por otras patologías en tiempo de pandemia: estrés, vulnerabilidad , elevados niveles de agotamiento mental, depresión, irritabilidad, insomnio, dificultades de concentración, dificultades graves en la toma de decisiones. Si algo ha puesto de manifiesto la crisis es a la carga desproporcionada que han soportado, las trabas e impedimentos para la conciliación personal, familiar y laboral y que la desigualdad persiste.
Ya sea de forma presencial en las manifestaciones organizadas por los colectivos feministas ya sea desde el balcón o la ventana de las propias casas, las mujeres están convocadas este año a poner voz sobre la situación de las mujeres en este año de pandemia. Las experiencias, perspectivas y habilidades diferentes que aportan las mujeres, son fundamentales y definitivamente tienen que formar parte indispensable en las decisiones, las políticas y leyes para todas y todos. Por la igualdad real.
No queremos olvidar el relevante papel que las mujeres han tenido en la historia del Módulo desde sus inicios. Fue un grupo de mujeres del barrio las que propiciaron la creación del Módulo y en la situación actual son un colectivo que apoya y defiende con firmeza la causa del Módulo y su continuidad.