Barakaldo, con una superficie de 25 km2 y un 69% de suelo rural, contaba con 5 senderos, que se fueron perdiendo por falta de mantenimiento y señalización necesarios para que la Federación Vizcaína de Montaña (BMF/FVB) los homologue.
Eder Álvarez, concejal de la coalición, considera que la inversión a realizar en tareas de mantenimiento, señalización y conservación es “mínima en comparación con el retorno que genera el disponer de senderos en buen estado”, y recuerda que el objetivo de éstos no es solo “el disfrute del entorno” sino también “funcionar como un atractivo turístico y económico más para el municipio”.
Por ello, el grupo formado por Podemos, Ezker Anitza-IU, Equo-Berdeak e Independientes solicitará en el Pleno de febrero, en forma de ruego al equipo de gobierno, que se inicien los trabajos burocráticos, de desbroce y señalización encaminados a recuperar los senderos PR-Bi-211, PR-Bi-211.1 y PR-Bi-212.
El edil pone de relieve el PR-Bi-211, que además de ser patrimonio natural, “haría accesible y pondría en valor el patrimonio minero”, ya que en su recorrido se pueden encontrar restos como minas abandonadas, antiguas vías de ferrocarril o cargaderos. “Lamentablemente”, manifiesta Álvarez, “el sendero también tiene obstáculos derivados de la falta de mantenimiento”.
La coalición finaliza remarcando la importancia de poner en valor el patrimonio natural de la ciudad, especialmente “ahora que las medidas de confinamiento perimetral por la crisis sanitaria han dejado entrever la limitación de espacios abiertos y recorridos que tenemos en la ciudad y sus alrededores”.
