En su comunicado, el PNV afirma que "la inversión de la ciudad, especialmente en los barrios, contará este año con un presupuesto global de 38,7 millones". La declaración, sin embargo, es falsa. 38,7 millones son gastos ordinarios, como el autobús municipal o las limpieza de las calles, pero no habrá inversiones "reales" porque los 360.000 euros previstos no dan para ello. De hecho, sólo en publicidad, que es un gasto que no se reduce este año, están programados 330.000 euros.
Mientras otros Ayuntamientos, como Bilbao, Sestao, Getxo han decidido aumentar el gasto para ayudar a la recuperación de la crisis causada por la pandemia de coronavirus covid19, el PNV, con el apoyo de los votos de su socio, el Partido Socialista, aplica en Barakaldo un recorte general del presupuesto de un 3,8%, que en el caso de las inversiones es del 68%.
De hecho, desde que accedió al poder el Partido Nacionalista con Amaia del Campo al frente, ningún año se ha caracterizado por el esfuerzo inversor. Desde 2016, el primer año completo de Del Campo como alcaldesa, sólo se han incluido 9.167.267,13 euros en seis años como inversiones en los presupuestos aprobados. El último presupuesto aprobado de los socialistas, en 2014, contó con 7.395.465,11 euros en inversiones, y en los seis años anteriores al PNV, las inversiones sumaron 34.449.596,86 euros.
Los datos oficiales revelan que en 2021 sólo el 0,32% de los 113,8 millones de euros irán a inversiones. El año anterior también había sido malo, con el 0,97%. En el registro histórico de las dos últimas décadas, el mejor año fue 2004, con un 21% del presupuesto en inversiones: 21,5 millones de euros para la localidad. Incluso en la crisis financiera iniciada en 2008, las inversiones más bajas nunca fueron inferiores a 1,5 millones de euros.
Archivo |
21/02/2019. Los presupuestos de 2021 recortan en educación, empleo, cultura, seguridad y centros de día para ancianos