por Koldobika López Grandoso | historiador
• Realizó trabajos forzados en Mauthausen y sufrió los experimentos del Doctor Muerte •
El pasado 25 de enero murió en Poitiers (Francia) Marcelino Bilbao Bilbao, nacido en el entonces barrio barakaldés de Alonsotegi en 1920. Marcelino fue huérfano de nacimiento y no le quedo más remedio que ponerse a trabajar en la mina de Castrejana llamada La Primitiva" a la edad de 12 años. Cuando estalló la Guerra Civil, Marcelino, que había sido miembro de las Juventudes Socialistas Unificadas (JSU) durante la II República, se alistó en el batallón de la CNT Isaac Puente, que formaba parte también del Eusko Gudarostea.
Tras la caída de Asturias, muchos de los integrantes fueron evacuados a Francia, como en el caso de Marcelino, que llegó a Burdeos, desde donde pasaron a Cataluña para seguir con la lucha. Luchó en la batalla de Teruel (febrero 1938) y en verano de ese mismo año participó en la batalla del Ebro, ganando la medalla al valor.
En febrero de 1939 Marcelino cruzó la frontera con Francia. En el país galo, Conoció varios campos de concentración (Saint-Cyprien, Argeles-sur-mer y Gurs). Allí fue alistado en un batallón de trabajo, y trasladado a la línea Maginot. Una vez estalla la II Guerra Mundial, es hecho prisionero por los nazis en 1940 y es deportado a finales de año al campo de concentración de Mauthausen.
Allí tuvo el número de identificación 4628. Tuvo que trabajar durante dos años en la tristemente famosa cantera de Mauthausen, para convertirse después en cobaya humana de los experimentos del medico nazi Aribert Heim. Este medico era más conocido como Doctor Muerte y solía experimentar con diversos compuestos tóxicos inyectados directamente en los corazones de los prisioneros.
La suerte de Aribert Heim tras la guerra está envuelta en la bruma de las suposiciones porque incluso se desconoce cuando murió este individuo. Marcelino Bilbao se vio sometido a los experimentos del Doctor Muerte, al igual que 30 compañeros más, de los que solo sobrevivieron siete.
En el año 1943 fue trasladado al campo de concentración de Ebensee, donde gracias a que había una cantidad mayor de republicanos detenidos, sus condiciones de vida cambiaron levemente a mejor. Allí se hizo miembro de la resistencia del campo, creado para evitar las matanzas de prisioneros. El 5 de mayo de 1945 fue liberado y, tras una larga travesía a pie, llegó desde Austria a París, donde fueron atendidos por el Gobierno francés.
Sus vivencias como prisionero en el campo de concentración nazi de Mauthausen las contó en el libro 'Triángulo azul' y en diversos documentales. Ésta es la historia de un barakaldés de nacimiento, aunque Alonsotegi dejara de ser barrio de Barakaldo en 1991. Alonsotegui fue Barakaldo desde 1888 hasta 1990. Y creo que es importante recordar, cuando se acaba de celebrar en toda Europa el Día del Holocausto, que varios barakaldeses acabaron pasando por los campos de concentración de los nazis, muriendo varios de ellos en dichos campos. Por eso mismo, creo que unas líneas de homenaje a un barakaldés de nacimiento no están de más.
Koldobika López Grandoso