Un total de 22 empresa e instituciones han mostrado su compromiso con el retorno de barakaldeses que han tenido que emigrar en busca de oportunidades laborales. Este es el primer balance del proyecto 'Volvemos a Barakaldo' que se puso en marcha hace un mes y medio y que ya ha contactado con 51 barakaldeses que han expresado su interés en regresar a la anteiglesia y ha elaborado una página web en la que ya hay registradas 16 ofertas de trabajo. El proyecto, impulsado por Volvemos.org con la colaboración de Nordic Basque y financiado por el Ayuntamiento de Barakaldo, ha celebrado este miércoles 20 de diciembre en el centro empresarial BIC Bizkaia Ezkerralde un encuentro sobre las oportunidades de retorno de los barakaldeses que han emigrado en el que han tomado parte administraciones, empresas y vecinos de la localidad que residen en otros países a los que han ido en busca de un trabajo.
Es el caso de Sergio Pardo, ingeniero de minas que tras una breve estancia en Canadá ha acabado en Argelia, donde desde hace dos años trabaja en la construcción de una refinería. Aunque cada dos meses puede regresar durante una semana a Euskadi, Pardo desea asentarse de manera permanente en tierras vascas, siempre y cuando pueda volver "en buenas condiciones" con un trabajo que le de estabilidad laboral.
Este joven reconoce que "siempre" se tiene la idea de volver y espera que de esta experiencia en el proyecto 'Volvemos a Barakaldo' salga alguna oferta en el sector industrial, aunque reconoce que es "complicado" porque su campo es el de la construcción de plantas industriales.
Aunque no le costó hacer las maletas y marcharse a Canadá, su estancia en Argelia es más dura con la vida diaria en un recinto militar y con el pueblo más cercano a 150 kilómetros.
Raúl Gil, uno de los fundadores de volvemos.org ha destacado que ‘Volvemos a Barakaldo’ puede “servir de referencia también para Bizkaia” y se ha congratulado de los resultados obtenidos en este mes y medio que el proyecto lleva en funcionamiento.
En sus inicios había 30 barakaldeses que residen en otros países en la base de datos de volvemos.org y ahora hay 51, lo que a juicio de Gil, demuestra que "hay mucho interés” por parte de los barakldeses emigrados. Además, se ha dado asesoramiento a través de Skype a unos 20 personas y se han reunido 16 ofertas de empleo en la web del proyecto y hay 22 empresas e instituciones "comprometidas con el retorno" de barakaldeses.
Gil ha destacado que el objetivo del proyecti es "conectar a los emigrantes que quieren volver, que son muchos, con las empresas de aquí que quieren contratar talento internacional, gente con experiencia, con idiomas, que ha conocido otras culturas, que conoce otras metodologías de trabajo".
Además de las consecuencias económicas, el proyecto también tiene efectos “positivos” a nivel familiar y social, porque “las familias quieren que sus hijos vuelvan” y “sienten su ausencia”.
Maite de Prado, otras de las vascas emigradas que ha participado en la jornada de hoy, se fue a Bogotá hace cinco años en busca de trabajo. Ahora, con 32 años trabaja como restauradora de arte en la Biblioteca Nacional de Colombia. "Siempre tienes la esperanza de poder volver", ha destacado esta joven de Astrabudua que no está dispuesta a volver si no encuentra algo que se ajuste a su perfil profesional.
