Decenas de vecinos de Barakaldo y Portugalete participan en una marcha a la prisión de Granada para exigir el fin de la dispersión de presos vascos. La movilización desde la anteiglesia y la villa jarrillera suma un autobús a los 73 que, simultáneamente y con 3.500 personas a bordo, acuden este
20 de febrero a las cárceles españolas así como a la francesa de Rennes, convocados por la
izquierda 'abertzale'. La organización afirma que "para que el futuro de Euskal Herria sea libre y democrático, el regreso a casa de todos los presos políticos vascos es una condición imprescindible". Además del fin de la dispersión, la protesta demanda "la inmediata puesta en libertad de los presos gravemente enfermos" así como "la derogación de toda la legislación de excepción y todas las formas de castigo añadido que se utilizan" contra los reclusos vascos.