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Ruaille-Buaille | grupo de folk
"Queremos compartir la alegría por ganar el concurso del Festival Internacional de Ortigueira"


por Mariela Estévez Campos | Fotos cortesía de Ruaille-Buaille

Un concierto "muy especial" en el que "compartir la alegría" tras ganar el concurso de bandas emergentes del Festival Internacional del Mundo Celta de Ortigueira (A Coruña). Así se plantea su actuación de este 18 de julio en las fiestas del Carmen, en Herriko Plaza, el conjunto barakaldés Ruaille-Buaille, que se pronuncia "rula-bula". Con la "inmensa alegría" de este nuevo éxito en el certamen gallego, la formación no se detiene y ya prepara el que será su tercer disco, que quiere grabar este mismo año y de nuevo con su propias composiciones, que funden música tradicional irlandesa con fuentes del folk vasco, gallego, balcánico y distintos estilos. Duncan Bennett (1961), guitarra acústica y voz; Alberte Sanmartín (1970), gaita gallega, uilleann pipes, whistles; Aitor Gorostiza (1962), whistles, armónica, alboka, tarota y boha; Kike Pérez (1959), violín y bodhrán; Luis M. Aveleira 'Beltza' (1969), bajo eléctrico y voz; y Jon Hanni Iribar (1981) a la batería forman Ruaille-Buaille.

Pregunta. ¿Cómo ha sido la experiencia en el Festival de Ortigueira?
Respuesta. Inolvidable. Era la primera vez que nos presentábamos a un concurso y ya el calificarnos para la final fue una inmensa alegría. Fuimos a la final con la intención de disfrutar y sin ánimo de disputar. El Festival de Ortigueira es mítico en el panorama folk nacional e ir allí por primera vez y, además, a actuar en el escenario es una sensación indescriptible. Terminamos el concierto con la sensación de haber cumplido pero de haberlo podido hacer aún mejor y por ello, cuando al día siguiente nos comunicaron el resultado, no pudimos evitar que afloraran un montón de emociones.

P. ¿Qué hace un grupo vasco en un certamen de música celta?
R. El Festival Internacional del Mundo Celta de Ortigueira no está limitado a lo estrictamente celta y por él han pasado también conjuntos que poco tienen de celta: grupos suecos, finlandeses, alemanes, húngaros, rumanos y, como no, vascos. En la programación principal han actuado, y varias veces, artistas y grupos como Kepa Junkera y Oskorri, y en la final del certamen de bandas emergentes, Runas, antes que nosotros han intervenido Xabi Aburruzaga, Kukuma, Brigantia y Korrontzi, que posteriormente actuó en la programación principal. Y por señalar algo curioso, el grupo que ganó el año pasado el certamen era japonés.

P. ¿Qué pesó más para que llegaran a la final, los votos por internet o el apoyo del jurado especializado?
R. De todos los grupos que nos inscribimos, presentando cinco temas cada uno, fuimos seleccionados 10 para la semifinal, que se dilucidó entre el voto de Internet y el del jurado especializado. El voto por internet no quiere decir un voto por persona, pero suponía un quinto del total y estaba ponderado: los cinco grupos más votados en internet recibían 7, 5, 3, 2 y 1 voto, respectivamente. De la misma manera, votaban cada uno de los cuatro miembros del jurado especializado. En internet quedamos los quintos, pero tras sumar el voto del jurado, nos situamos como primeros finalistas.

P. ¿Y el triunfo en la final?
R. El jurado de la final, que estaba compuesto por el coordinador del Festival, un productor musical, un representante de la Escola de Gaitas de Ortigueira y dos personas elegidas al azar entre el público asistente, se decidió por Ruaille-Buaille, según el fallo, “por su calidad musical, su técnica y su capacidad para fusionar músicas del Arco Atlántico y levantar al público congregado”.

P. ¿Cómo será la actuación en las fiestas de Barakaldo?
R. Para nosotros va a ser muy especial porque nos va a dar la oportunidad de compartir la alegría por lo conseguido en Runas con la gente que conocemos. Vamos a ofrecer principalmente temas de nuestro segundo disco, ‘Blue Jig’, junto a algunos del primero, 'pronounced rula-bula', y algún tema nuevo.

P. Compartirán escenario con Vembrulé. ¿Por qué creen que los han juntado en la programación cuando los públicos de ambos grupos son tan diferentes?
R. Que los estilos de los grupos sean distintos no implica que el público lo haya de ser. No vivimos en mundos estancos y a una misma persona le pueden gustar estilos distintos. Si algo positivo tienen la música folk o las músicas del mundo es que te permiten apreciar y disfrutar las diferencias, aprender de ellas y te enseñan a asimilarlas y a reelaborarlas cada uno a su manera. Es un enriquecedor encuentro de diferentes.

P. ¿Cómo surgió el grupo?
R. Ruaille-Buaille, como tal, nació en 2005 fruto del reencuentro de varios amigos que habían compartidos proyectos anteriores, como los desaparecidos grupos Sugan y Feile, que tuvieron origen en aquellas memorables 'sessions folkies' de comienzos de los noventa del Café del Teatro de la calle Ibarra.

P. ¿De dónde proceden musicalmente cada uno de ustedes?
R. Cada uno de una madre. Unos de la música anglosajona y country, otros de la celta, unos de la vasca o de la gallega, otros del folk-rock o del blues. Eso hace que Ruaille-Buaille sea un cóctel de distintos sabores, que se van combinado en cada pieza en distintas proporciones, según como nos guíe la inspiración.

P. ¿Cómo deciden esa fusión de instrumentos de distintas nacionalidades?
R. No es algo que obedezca a una decisión o a una planificación. El grupo es fruto de la unión de componentes que aportan cada uno sus experiencias y sus instrumentos. Con el tiempo y el trabajo en común hemos ido encontrando una manera natural, para nosotros, de conjuntar esos timbres.

P. ¿Pueden explicar cada uno de ellos?
R. Va a parecer un catálogo de un 'todo a cien'. Junto a instrumentos más comunes a todo tipo de grupos como la guitarra, el bajo eléctrico y la batería, están el violín, las armónicas, el bouzouki (una mandolina de cuello largo), la gaita gallega, la uillean pipe (gaita irlandesa, que se hincha, no soplando directamente, sino por medio de un fuelle), la alboka (en la que el fuelle es la barriga del ejecutante), la tarota (una larga dulzaina catalana), la boha (o cornamusa de la Landas), los whistles y low whistles (flautillas y flautones irlandeses) y alguno que nos dejamos.

P. ¿Qué significa su nombre y de dónde procede?
R. El nombre Ruaille-Buaille, que se pronuncia rula-bula, significa ‘bullicio’ o ‘algarabía’. Procede del gaélico irlandés y lo utilizan para describir el ambiente ruidoso de las 'sessions' en los típicos pubs irlandeses, la mezcla de las melodías de los músicos y el barullo de los que allí se congregan para escuchar, hablar y beber. En ese tipo de 'sessions' trabamos amistad y comenzamos a tocar juntos, y ese ambiente distendido es el que nos gusta transmitir en el escenario.

P. ¿Cuál es el estilo de Ruaille-Buaille?
R. Sobre una base con raíz celta, se imbrican con naturalidad otras músicas y tendencias. Con el tiempo, los cambios de formación y el trabajo en común, el grupo ha evolucionado del inicial quinteto acústico con una tímida base rítmica a un sexteto con sólida base rítmica aportada por el bajo eléctrico y la batería. El repertorio ha pasado de ser casi exclusivamente música tradicional irlandesa a primar la composición propia inspirada en más fuentes que las celtas, ya del folk vasco, gallego, balcánico o country, como de otros estilos como el blues o el ska. Y la estructura de los temas es ahora más rica y compleja, despegada del desarrollo lineal de los temas tradicionales. Pero si algo no ha cambiado es el buen humor en el escenario.

P. ¿Cómo les reciben en Barakaldo, dónde parece que no hay cabida para nada que no sea punk o rock?
R. Nos sentimos como en casa porque estamos en casa. Hay grupos, coros, orquestas y combos de distintos tipos, grupos de música de aquí y allá, cantautores, fanfarrias, escuelas de música reglada y no reglada, y una banda municipal que es de las pocas que han podido mantenerse con una creciente y altísima calidad, envidia de propios y extraños. Pero sí, también es cierto que Barakaldo ha sido y es una potente cantera de grupos rock y punk, como recuerda Gotzon Hermosilla en su reciente libro ‘Barakaldo revienta’.

P. ¿A qué creen que se debe esa gran concentración de agrupaciones de esos estilos?
R. Probablemente a que han servido para expresar la rabia y el hartazgo por la situación social en un municipio que ha sufrido una crisis tras otra, reconversiones y desmantelamientos de industrias, contaminación y degradación del medio ambiente, creciente desempleo, caída de la capacidad adquisitiva de su población y de la actividad comercial. Es una paradoja el hecho de que, mientras Barakaldo se ha ido convirtiendo estéticamente en un lugar más agradable para vivir, crecientes sectores de su población padecen condiciones de vida cada vez menos agradables.

Foto: Eduardo Camino
P. ¿De qué temas tratan sus canciones?
R. De todo un poco. Hay canciones de amor y de desamor, de guerras pasadas y recientes, de bebida, de vida y de muerte.

P. ¿Quién compone?
R. Las hacemos entre todos. Se suele partir de una idea inicial aportada por alguno, que en cuanto es puesta encima de la mesa pasa por un proceso de elaboración y transformación en el que todos participamos, proponiendo ideas sobre el desarrollo de las melodías, las armonías, la estructura del tema, los arreglos y al final, poco se parece a la idea de la que se partió.

P. ¿Qué grupos les parecen un modelo a seguir?
R. Siendo seis y cada uno de procedencia musical tan distinta, habría que hacer seis listas.

P. ¿Por qué deberían comprar su disco los barakaldeses?
R. No se debe comprar nada si no se quiere, si no te gusta o si se tienen otras necesidades más acuciantes. Para quien pueda permitirse gastar unos 10 eurillos, es un disco que creemos que se puede escuchar una y otra vez, con diversidad de melodías y timbres. Temas alegres y alguna balada lenta. Hay temas instrumentales y cantados, unos en inglés, otro en gallego y otro incluso en errominchela, el habla de los gitanos de Euskal Herria, que está en riesgo de desaparecer. Pero lo mejor es venir a un concierto del grupo, escuchar y, si te gusta, te compras el disco o lo buscas en internet.

P. ¿Cuáles son los próximos proyectos del grupo?
R. Estamos terminando de preparar lo que queremos que sea nuestro tercer disco. Tenemos intención de entrar a grabar este año, si la situación lo permite, ya que, como los anteriores trabajos, lo produciremos nosotros mismos. Creemos que va a ser un álbum muy interesante, en el que el estilo de la banda va a aparecer mucho más definido, más homogéneo y personal.