El equipo de gobierno socialista ha anunciado que el Ayuntamiento de Barakaldo cerró el ejercicio 2012 con un superávit de 7,1 millones de euros debido, según el PSE, a que se ha gastado "mucho menos de lo previsto" y a que "en casi todas las partidas se ha ingresado más de lo presupuestado". Sin embargo, los socialistas han reconocido que, en realidad, la cifra neta final es de 1,4 millones porque 2,8 millones son de facturas pendientes de pago, mientras ocasi tres millones son para el pago de créditos. El remanente se incorportará al presupuesto de 2013 y se empleará en pagar la finca Munoa. El año pasado se pagaron siete millones de euros y el PSE dice que su intención es pagar cuanto antes los 18 millones, entre indemnización e intereses, que establecía la sentencia del Tribunal Supremo para que se generen los menores intereses de demora posibles.
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Nota de prensa
El Ayuntamiento de Barakaldo cerró 2012 con un superávit de más de 7 millones de euros
> La concejal de Economía y Hacienda, Olga Santamaría, anuncia que la mayor parte de ese dinero se destinará a la compra de la Finca Munoa para abrirla como parque a la ciudadanía
> La institución local paga a los proveedores en 30 días
Barakaldo, 14-2-2013
El Ayuntamiento de Barakaldo tiene sus arcas cada vez más saneadas. La institución local ha cerrado el ejercicio presupuestario de 2012 con un superávit o remanente de tesorería de 7.184.678 euros (en 2011 fue de 1,2 millones). Se trata de una cantidad importante, muy superior porcentualmente al de otras instituciones, y que evidencia el esfuerzo realizado por el Equipo de Gobierno municipal por contener el gasto corriente en una época de fuerte reducción de ingresos como consecuencia de la crisis económica. El dato deja a las claras también que no es necesario un Plan de Saneamiento Financiero.
La concejal de Economía y Hacienda, Olga Santamaría, ha detallado en rueda de prensa la liquidación presupuestaria de 2012, una foto fidedigna de las arcas municipales basada en un exhaustivo informe del interventor municipal y que ha sido aprobada en el día de hoy.
Los más de 7 millones de euros de superávit logrados el ejercicio pasado se incorporarán al Presupuesto de 2013, que será presentado en breve. Santamaría ha recordado que la ley obliga a destinar ese dinero a la amortización de deuda o a la realización de nuevas inversiones y ha adelantado que la mayor parte de este dinero se destinará a precisamente a una inversión: la compra de la Finca Munoa para abrirla al conjunto de los barakaldeses y barakaldesas como parque público.
Una sentencia judicial fijó una indemnización de unos 12,7 millones de euros más intereses (en total, unos 18 millones) a la familia propietaria de la finca, después de un largo contencioso que se remonta a los años 80. El año pasado se pagaron 7 millones de euros y la intención del Equipo de Gobierno local es abonar cuanto antes el resto para que se generen los menores intereses de demora posibles.
Sobre la liquidación presupuestaria de 2012, Santamaría ha subrayado que deja a las claras que “hemos gastado mucho menos de lo que hemos ingresado porque fuimos prudentes a la hora de confeccionar el presupuesto, sobre todo en materia de ingresos. Y eso, dentro de una coyuntura económica tan complicada como la actual, es una muy buena noticia para Barakaldo porque significa que se están haciendo bien las cosas”.
MENOS INGRESOS DE DIPUTACIÓN
Lograr los más de 7 millones de euros de superávit no ha resultado sencillo. De hecho, por la vía de los ingresos el Ayuntamiento no tiene mucho margen. Año tras año se ingresa menos dinero y la capacidad de tomar medidas para frenar esta sangría es casi nula.
Los ayuntamientos de Bizkaia se nutren en un 60% de lo que la Diputación les proporciona a través del fondo foral Udalkutxa, ya que es la institución encargada de la recaudación fiscal que suma mayor volumen de ingresos, como son el Impuesto de Valor Añadido (IVA), el IRPF o el Impuesto de Sociedades.
Desde 2008 la Diputación ha aportado al Ayuntamiento de Barakaldo alrededor de 18 millones de euros menos y en los últimos ejercicios se ha desviado en la previsión de ingresos de forma importante, obligando al Consistorio a devolver parte de los ingresos ya recibidos o rehacer las cuentas sobre la marcha.
A pesar de todo, el Ayuntamiento de Barakaldo ha logrado en 2012 los más de 7 millones de euros de superávit gracias a que ha gastado mucho menos de lo previsto y a que, salvo en las transferencias de capital (dinero procedente de la Diputación, el Gobierno vasco y el central), que han caído 4 millones de euros, en casi todas las partidas se ha ingresado más de lo presupuestado.
En el capítulo de ingresos ordinarios, sin ir más lejos, se han obtenido 1,3 millones de euros más de lo previsto por el Impuesto de Actividades Económicas y Empresariales (IAE), un aumento que se debe al control del fraude y, en concreto, a varios expedientes sancionadores abiertos a un conglomerado de empresas ubicado en Lutxana.
AHORRO EN BIENES Y SERVICIOS
En cuanto a los impuestos indirectos, en cambio, se han recaudado 1,4 millones de euros por el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) fruto de que se han retrasado diversas operaciones inmobiliarias privadas, mientras que en las tasas y otros ingresos se han logrado 14,8 millones de euros, 1,1 más de lo esperado.
La mayor diferencia se observa en los gastos. En personal se han ahorrado 1,7 millones de euros fruto de la obligación impuesta por el Gobierno de España de no abonar la paga extra a los funcionarios. Pero donde se ha obtenido un mayor ahorro (más de 2 millones más de lo previsto) es en los gastos en bienes corrientes y servicios; es decir, en lo que se paga a las empresas por la compra de bienes y la prestación de servicios básicos para la ciudadanía.
Para lograr ese ajuste se han tomado medidas como la renegociación de contratos con las empresas para reducir su margen de beneficio, el control del uso de las líneas de teléfono o el ahorro de energía eléctrica a través de un Plan de Eficiencia Energética, por citar algunas.
“Hemos tomado numerosas medidas de austeridad, siempre sin sobrepasar dos líneas rojas, como son el mantenimiento de los servicios básicos a los vecinos y vecinas y de los puestos de trabajo dependientes de nuestra institución”, ha insistido.
SOLVENCIA Y CAPACIDAD PARA ENDEUDARSE
Si se descuenta de lo que el Ayuntamiento ha ahorrado en bruto la amortización de los préstamos y los intereses que estos generan, queda un ahorro neto positivo de 4.186.367,59 euros. Se trata de un dato muy importante porque evidencia la solvencia del Ayuntamiento y muestra la capacidad que tiene para hacer frente a nuevos préstamos o créditos.
El hecho de que contar con un ahorro neto positivo de más de 4 millones de euros quiere decir que, si es necesario, el Ayuntamiento puede endeudarse, algo que Olga Santamaría no descarta. “Tenemos capacidad y margen para hacerlo, además de una de las deudas vivas más bajas del entorno”, ha recordado.
Figura en la liquidación presupuestaria un importe de 2,8 millones de facturas pendientes de reconocimiento de obligación por parte del Ayuntamiento; es decir, facturas presentadas por empresas proveedoras o que han prestado algún servicio, pero con las que existe alguna discrepancia pendiente de resolver. Hay que tener en cuenta que 2,3 están en vía judicial y por tanto será el juez el que diga sí le correspondan Ayuntamiento o pagar o no.
Los 500.000 restantes se está en un proceso de depuración como consecuencia que muchas ocasiones de facturas duplicadas o de falta de coordinación con el proveedor.
“No se debemos nada a nadie ni tenemos facturas de cajón. Y esto quiero dejarlo claro, porque algunos se empeñan en presentar estas facturas como una deuda. Basta con hacer un ejercicio de sentido común. Si el Ayuntamiento de Barakaldo tuviera facturas pendientes de pago tendríamos a los proveedores en la puerta, o bien no se presentarían a las nuevas licitaciones que sacamos. Y ocurre todo lo contrario”, ha evidenciado Santamaría.
Ahora mismo, el Ayuntamiento de Barakaldo está pagando a sus proveedores a 30 días -10 menos que el año anterior-, conforme indica la ley actual, y tiene liquidez suficiente para afrontar nuestros pagos ordinarios.
