La vía tendrá dos carriles de 1,5 metros de ancho y comienza en la calle Llano, a la altura del centro educativo, en una esquina en donde está además previsto crear un "pequeño" aparcamiento de bicicletas. El carril discurre por la zona ajardinada del parque de Orconera para terminar en las inmediaciones de la torre de ventilación del metro junto al estadio de fútbol de Serralta, en donde enlaza con el camino ciclista existente.
La elaboración del plan de obra fue encargado en marzo pasado, mediante contratado directo —a dedo— a la ingenería de Bilbao Boslan, para "ser financiada con cargo a los Fondos Europeos procedentes del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia". El proyecto se ha incluido como actuación de "restauración paisajística del entorno de la ría del Nervión" cumpliendo el "principio de no causa perjuicio significativo al medio ambiente".
El parque cuenta con grandes espacios de césped con numerosos árboles y arbustos variados e itinerarios internos peatonales pavimentados con hormigón acabado impreso y limitados por bordillo jardinero de hormigón
En la zona norte del parque, al otro lado de la calle Llano, los itinerarios peatonales están ejecutados con asfalto, una parte sin bordillo y la parte final con bordillo jardinero de hormigón. El camino peatonal final del parque cuenta con cuenta prefabricada en forma de “U” y red de drenaje por debajo.
El parque cuenta en su totalidad con red de alumbrado público y red de riego automatizado.
La conexión final se realiza en otro tramo de carril bici recién ejecutado en el año 2023. El carril bici cuenta con una plataforma de 3 metros de ancho acabado con mezcla bituminosa pintada de rojo característico de estas vías ciclables.
DESCRIPCIÓN DE LAS OBRAS
Se proyecta una senda ciclable de carácter bidireccional segregada físicamente del tráfico motorizado y peatonal. La anchura de la plataforma de circulación es de 3 metros, con carriles de 1,5 metros de ancho cada uno.
La longitud total del carril bici es de 345 m. Comienza en la zona alta del parque Orconera, en concreto en la calle Llano, a la altura del colegio Munoa, en una esquina ajardinada donde se construirá un pequeño aparcamiento de bicicletas. Tras cruzar la calzada y aceras de la calle Llano, el trazado discurre a través de la zona verde del parque, en dirección Norte en paralelo a uno de los senderos peatonales.
A unos 150 m, el carril se bifurca para dejar en medio una palmera existente y vuelve a unirse para girar a la derecha y atravesar el camino peatonal.
A continuación, se vuelve a cruzar la calle Llano junto a un paso peatonal existente adentrándose en la zona norte del parque. El carril bici continúa hacia el norte en paralelo a la senda peatonal existente unos 80 m y luego gira 90 grados hacia el Este para continuar sobre la plataforma de otro sendero, que quedará anulado para caminantes. Tras otros 70 metros, se atraviesa un murete de mampostería que delimita el parque y se llega a la conexión con el carril bici existente que conecta las calle Serralta con Obispo Padre Olaetxea.
TRAZADO
A la hora de diseñar el trazado se ha tenido en cuenta la “Guía de recomendaciones para el diseño de infraestructura ciclista” del Ministerio de transportes, movilidad y agenda urbana, elaborado en 2023.
En cuanto a la anchura, para vías de circulación en dos sentidos, se establece un ancho mínimo de 2,20 m y un ancho recomendable de 2,60 m. A ello, debe añadirse un resguardo de 15 centímetros a bordillo y 30 centímetros a elementos puntuales (árboles, farolas, etc).
En el trazado de curvas en tramos sin intersecciones, los radios de curvatura recomendados oscilarán entre los 10 m y los 30 m para garantizar unas velocidades mínimas entre 20 km/h y 40 km/h, si la superficie de rodadura se encuentra pavimentada y presenta una buena adherencia.
En el trazado de curvas en intersecciones, los radios de giro se reducen hasta un mínimo de 3 m, si no se requiere la parada.
Aunque radios de giro inferiores a 3,2 m obligan al ciclista a parar o realizar maniobras de equilibrio complicadas, pueden ser adecuados o convenientes dependiendo del diseño de prioridades de la intersección.
Se recomienda que las rampas no superen el 5 % de pendiente, pudiendo adoptarse pendientes hasta el 8 % en casos excepcionales
La longitud de las rampas es otro factor importante a tener en cuenta. En general, la capacidad de las personas que van en bici para hacer frente a una determinada pendiente está en función del tiempo durante el que deben mantener el esfuerzo extra, es decir, de la longitud del tramo en pendiente.
SOLUCIÓN ADOPTADA
Se ha conformado un trazado que afecte en la menor medida posible a los servicios (alumbrado, mobiliario urbano, drenaje, etc.) y árboles presentes en el parque, además de mantener en los caminos peatones existentes una anchura mínima de paso de dos metros.
En cuanto al trazado en planta, el eje de la vía ciclista está diseñado con una secuencia de alineaciones rectas y curvas circulares. El radio mínimo empleado en curvas circulares donde hay una intersección con un camino peatonal es de 4 metros. El radio mínimo para una curva sin intersección es de 6 metros. Las alineaciones rectas tienen una longitud máxima de 46 metros.
En cuanto al trazado en alzado, se ha adaptado el carril bici a la orografía del parque, para evitar grandes movimientos de tierra ni elementos de contención laterales. Se proyectan una serie de rasantes, todas en pendiente negativa y acuerdos verticales, con una inclinación máxima de -17% en una pendiente corta de 5 m de longitud para salvar el desnivel existente entre la palmera y la senda peatonal. La pendiente máxima en un tramo sostenido es del -14% en una longitud de 16 metros.