Los hechos se produjeron el 16 de mayo de 2021 debido al atasco del colector municipal. La aseguradora de un residente en la calle Barandiarán 7 reclamó al Ayuntamiento por los perjuicios sufridos debido a la inundación del inmueble, pero la institución municipal rechazó en octubre de 2023 compensar a los damnificados alegando que el bloqueo se había producido después del siniestro.
"El día del incidente, a la mañana, cuando los desperfectos ya se habían producido, acudió personal de los Servicios Municipales y no detectó indicio de problema alguno en la red municipal. Los Servicios Municipales volvieron a la tarde y entonces vieron que sí existía un atasco y procedieron a solventarlo", alegó el Ayuntamiento para negarse a pagar.
Sin embargo, la justicia ha declarado nula la desestimación del Ayuntamiento de la reclamación de responsabilidad patrimonial por los daños y, en consecuencia, se ha procedido a admitir ahora, casi dos años después del siniestro, el abono de la indemnización correspondiente.