Hicieron un balance un tanto agridulce del año que ha finalizado. Entre os logros, citan la perseverancia y la continuidad de la lucha que este movimiento ha sido capaz de mantener a lo largo de SEIS años, con un pulso sostenido para llevar a cabo iniciativas propias en favor del mantenimiento del sistema público de pensiones, como para apoyar otras luchas de ámbito local, vasco o estatal, con las que se han sentido solidarios, convirtiéndose en referente para otros agentes sociales del país y de fuera del país.
En estos años han conseguido superar la revalorización anual del 0,25% inicial, el factor de “sostenibilidad” y han logrado vincular la revalorización anual al IPC; También dicen haber frenado otras cuotas reductoras de la cuantía de las pensiones actuales y futuras, y haber conseguido mejorar parcialmente las pensiones más bajas (viudedad, no contributivas) y haber dado el toque a la sociedad con la importancia del tema de los cuidados, aludiendo particularmente a la huelga del pasado 30 de noviembre. Dicen ser conscientes de que su lucha ha forzado estos cambios y que los beneficiarios no son sólo los actuales pensionistas, sino las futuras generaciones.
Sin embargo, dicen no haber conseguido objetivos como recuperar la paga compensatoria (“paguilla”) de enero, mejorar la situación en las residencias, o asegurar una pensión mínima de 1080€ para todo tipo de pensionistas, o en su defecto, el complemento que provisionalmente las complemente; todo ello, a pesar de las numerosas campañas llevadas a cabo con este fin, los últimos meses de 2023, la última de cuyas iniciativas fue una moción al Pleno del Ayuntamiento de Barakaldo que finalmente fue rechazada por los votos de PNV-PSE.
También retoman los pensionistas del MPB la lucha por unos servicios socio sanitarios dignos; denunciaron, al respecto, la desidia que muestra la dirección de Osakidetza ante la actual ola de gripe, bronquitis, Covid,…. Denunciaron que al sistema vuelve a estar colapsado como en plena pandemia, por falta de previsión, reducción de horas de servicio y reducción de personal. “Los gestores de Osakidetza no han aprendido nada” se lamentan “… lo dicho: año nuevo, pero problemas viejos”.
Anunciaron que el próximo 15 de enero se cumplirán SEIS AÑOS de la salida de los y las pensionistas a las plazas, y que con tal motivo están preparando un recordatorio y una celebración. También repartirán información relativa a posibles reclamaciones (IRPF, gastos hipotecarios, RGI,…).
Una vez más, se mostraron solidarios con el pueblo palestino de Gaza, donde la agresión de Netanyahu parece no tener fin a pesar de la, al parecer, incipiente oposición interna israelí. Denuncian igualmente la hipocresía de las instituciones europeas y sus responsables, y su doble vara de medir, aludiendo al posicionamiento de Europa frente al conflicto Ruso-Ucraniano.
Tras agradecer a los 5.000 pensionistas que se dejan ver semanalmente en las 72 plazas habituales de Euskal Herria, y especialmente en Barakaldo, se dieron cita para el próximo lunes 15 de enero.