La asociación Aspanovas ha celebrado en el Hospital Universitario Cruces de Osakidetza dos sesiones para dar a conocer las posibilidades del yoga terapéutico durante el proceso hospitalario de las niñas y niños con cáncer. Apoyada por la estrategia de Humanización de la OSI Ezkerraldea Enkarteri Cruces de Osakidetza, la oportunidad de este encuentro surge con la llegada a Bilbao de la Red Internacional de Yoga Oncológico. Adriana Jarrín Morán, doctora en antropología y especialista en yoga para personas con cáncer, ha realizado una sesión formativa con personal sanitario en el HUC sobre los beneficios del Yoga Oncológico en pacientes pediátricos, seguida de una sesión práctica con familias.
El cáncer es una de las enfermedades más extendidas a nivel global, se estima que aproximadamente 18 millones de personas lo padecen en el mundo y alrededor de 280.00 en el Estado. Esta expansión de la enfermedad constituye un reto para la comunidad científica encargada de investigar mecanismos eficientes que permitan la prevención y control del cáncer y en el mejor de los casos su curación. No obstante, la enfermedad no se limita al ámbito de la medicina, sino que también tiene repercusiones en el espectro emocional y social de quienes lo padecen, así como en el entorno familiar, especialmente cuando hablamos de cáncer infantil y de adolescentes. Por este motivo, es relevante incorporar terapias complementarias a los tratamientos convencionales que permitan atender estos aspectos desde una perspectiva holística de la salud. En efecto, la Organización Mundial de la Salud desde 2004 lleva trabajando en un plan estratégico para promover la integración, reglamentación y supervisión de estas terapias con la finalidad cubrir de manera integral las necesidades sanitarias de la población (Informe OMS, 2014-2023).
El yoga forma parte de estas terapias complementarias reconocidas internacionalmente. La combinación de técnicas de relajación, respiración, concentración, movimiento y estiramiento que propone la metodología del Yoga Oncológico favorece el proceso de homeostasis del cuerpo, que se ha visto alterado debido a los altos niveles de estrés a consecuencia de la enfermedad y los tratamientos. En el caso del Yoga Oncológico dirigido a niños, niñas y adolescentes la metodología incorpora a cuidadoras/es que están directamente implicados en el proceso oncológico. En este sentido, es importante recalcar que el entorno en el que se desarrolla el proceso oncológico de los menores de edad en gran medida depende del estado emocional de sus cuidadoras/es así como de los recursos con los que cuentan para la gestión emocional en las distintas fases de la enfermedad
Pasillos largos, habitaciones de hospital, tratamientos engorrosos (dolorosos), batas blancas, etc., pasan a formar parte del paisaje cotidiano de los niños, niñas y adolescentes con cáncer y sus cuidadoras/es. Es prácticamente inevitable atravesar este camino. Sin embargo, lo que sí se puede transformar es el modo en que se transita por este camino, abriendo espacios para que la enfermedad se vivencie desde una perspectiva más amable. Por este motivo, la humanización de los espacios, así como la incorporación de terapias complementarias como en el yoga dentro de los recintos hospitalarios es fundamental.
Con la finalidad de dar conocer los beneficios tanto físicos como emocionales del yoga oncológico la sesión realizada en el Hospital Universitario de Cruces de Osakidetza ha consistido en:
- Una charla sobre los beneficios del Yoga Oncológico dirigida al personal sanitario: oncólogos/as, enfermeras/os y auxiliares.
- Sesión de Yoga Oncológico dirigido a niños, niñas, adolescentes con cáncer y cuidadoras/es interesados en conocer los beneficios del yoga como una herramienta para transitar de mejor manera el proceso oncológico y mejorar la calidad de vida de la familia.
* Enlace al texto en la web de origen
Este texto es un comunicado de la organización sanitaria integrada Enkarterri Cruces de Osakidetza
