Xabier Basañez es director general de Bilbao Exhibition Centre, y comenta: “Ayudar a alimentarse y vivir de una forma sana y consciente es la principal apuesta de BioCultura, una inquietud que comparte un número cada vez mayor de personas. En el caso de Euskadi, además, la demanda de productos “bio” tiene un público más fidelizado, ya que a lo ecológico se suma una alta concienciación en lo que tiene que ver con la exigencia de calidad. Por eso, desde Bilbao Exhibition Centre apoyamos de forma especial este certamen, que es una cita muy esperada del calendario y este otoño volverá a tener una acogida excelente”. Por su parte, Iker Iglesias, de Ekolurra-ENEEK (organismo encargado de la certificación y promoción de los alimentos ecológicos en Euskadi, que ejerce la función pública de la autoridad de control en el territorio), ha mostrado su absoluta complicidad para volver a celebrar una BioCultura con diferentes apoyos y como la feria se merece.
VOLVER AL PRINCIPIO
Ángeles Parra, directora de BioCultura, ha señalado: “Volver a celebrar la feria en Bilbao es casi como volver al principio, ya que desde 2018 que no se había vuelto a celebrar, debido a la pandemia. Ahora, estamos preparados y muy animados por la multitud de demandas tanto de empresas como de visitantes para celebrar una feria por todo lo alto y con todas las garantías de que será un gran evento”. Y añade: “Además del apoyo de ENEEK/Ekolurra, vamos a contar también con el apoyo de los ayuntamientos de Bilbao y Barakaldo, de la Diputación Foral de Bizkaia y del Gobierno Vasco. Será una nueva edición espectacular”.
RETOS EUROPEOS
Bittor Oroz es viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria en Eusko Jaurlaritza-Gobierno Vasco. Ha comentado: "Si observamos los datos actuales de nuestra agricultura ecológica, todavía queda mucho que hacer para hacer frente a los retos europeos, y para ello resulta fundamental promover la colaboración entre la Administración y el sector. Las estrategias agrarias europeas, las ambiciones del Consejo y la necesidad de las personas consumidoras de Euskadi nos obligan a dar pasos firmes. Por lo tanto, las principales líneas de trabajo consistirán en incrementar la rentabilidad de las explotaciones agroecológicas y de las empresas elaboradoras y fomentar el conocimiento y consumo del producto". BioCultura es un ejemplo emblemático de la difusión de la agricultura ecológica, pues es capaz de llegar tanto a nuevos públicos como a nuevos profesionales.
EL ASCENSO IMPARABLE DEL SECTOR “BIO” EN EUSKADI
Desde 2016, la superficie de tierras certificadas como ecológicas se ha triplicado en Euskadi, llegando al 5% de superficie agraria útil actual. El reto del Pacto Verde es conseguir que el 25% de las tierras sean ecológicas en 2030.
En 2022 el Consejo de Agricultura y Alimentación Ecológica de Euskadi certificó 1.199 nuevas hectáreas destinadas a la producción ecológica. En Gipuzkoa, con un incremento del 35%, el aumento de la superficie de tierras ha sido el más elevado a consecuencia de la inscripción de grandes ganaderos y ganaderas. Le siguen Álava con un crecimiento del 12% y Bizkaia, con un 5%. Desde 2016 hasta la actualidad, la superficie de tierras agrícolas certificadas de Euskadi casi se ha triplicado.
HORTICULTURA Y FRUTICULTURA
Aunque el ritmo de crecimiento de la superficie ecológica se ha ralentizado ligeramente respecto a años anteriores, mantiene la tendencia alcista aumentando a un ritmo anual del 15% (en 2021 el ritmo de crecimiento fue del 16%). Analizando la superficie ecológica por producciones, la horticultura (19,20%) y la fruticultura (21,05%) se sitúan muy cerca del 25% requerido por Europa. Con el objetivo de incrementar la producción ecológica, desarrollar las redes de comercialización de alimentos transformados y aumentar la demanda de alimentos ecológicos autóctonos, se dará continuidad al Plan de Fomento de la Producción Ecológica de Euskadi (FOPE) durante 2023-2026. “El papel de las ferias, de gran difusión, es fundamental para llegar a nuevos públicos”, dice Ángeles Parra.
GANADERÍA ECOLÓGICA
La producción animal ha mantenido una tendencia al alza (8%) con el incremento más notorio dentro de la cría de aves cárnicas y el vacuno. Sin embargo, la horticultura, la fruticultura y la viticultura han sido, una vez más, la ocupación de la mayoría de los y las profesionales de Euskadi. En estas tres actividades el crecimiento está siendo continuado y constante, mientras que la comercialización y la importación han bajado. Por ello, según Ángeles Parra, “es tan importante el papel de ferias como BioCultura. Para que el sector ecológico siga creciendo. Si el sector no llega al público, escasea el consumo”.
MÁS PROFESIONALES
El censo del Consejo experimentó un incremento del 1% en 2022 (un total de 43 profesionales se inscribieron en la producción ecológica). Cabe destacar que el 86% de las inscripciones se dedicaban con anterioridad a la producción convencional y han dado el paso al modelo ecológico. Por territorios, el mayor crecimiento se produjo en Álava (41,8%). Sin embargo, Gipuzkoa sigue siendo la provincia con más agentes, mientras que Bizkaia sufre un descenso del 2% respecto a 2021. De esta manera, y a pesar de que el censo sigue su senda ascendente, el censo del Consejo registró el año anterior el menor crecimiento de su historia en parte por la falta de relevo generacional. El interés por obtener el certificado ecológico, sin embargo, se mantiene y, al igual que en 2021, el Consejo recibió 90 solicitudes de información. “Pero es necesario que el sector ecológico llegue a la gente, que esté en los medios… Y eso se conduce, en gran medida, con ferias como BioCultura, que disparan el interés de la población y de los profesionales por el mundo ‘bio’”, señala Parra.
ECOLÓGICOS Y LOCALES: EKOLURRA
Ante la necesidad de combinar la calidad de los alimentos ecológicos con la producción local, a finales de 2021 el Consejo creó el distintivo Ekolurra. El distintivo, que aparece junto al de la Unión Europea, sirve para identificar los alimentos ecológicos de los y las productoras vascas. De esta forma, el Consejo ha respondido a una necesidad tanto de consumidores como de productores que recoge los valores de origen y calidad del alimento y que permite dar un gran paso a favor de lo ecológico. Cabe destacar que Euskadi es la única comunidad con marca ecológica propia. Desde los principios de Vida Sana/BioCultura, “siempre hemos apostado por la agricultura ecológica vista desde un prisma holístico. Y, en este sentido, es obvio que, para cerrar el círculo de lo ecológico, la producción ‘bio’ tiene que ser comercializada en un ámbito lo más local posible. Y ese es nuestro papel como feria. Proteger y promocionar a los pequeños productores locales frente a las grandes empresas que se están introduciendo en el sector ecológico y cambiando las reglas del juego del sector”.
TODA LA INFO
www.biocultura.org