En general, los delincuentes actúan en lugares con aglomeración de gente y sustraen bolsos, carteras o teléfonos móviles. Otras veces, pueden aprovechar que la víctima está bajo los efectos del alcohol para robarle. Por la experiencia de años anteriores, se ha constatado que algunos carteristas se desplazan expresamente a localidades en fiestas para cometer sus robos.
En estas fechas tampoco hay que descuidar la seguridad en los domicilios (sobre todo en bajos o primeros pisos) y prevenir asimismo los robos en vehículos no dejando bolsos ni objetos de valor en el interior de los mismos.
Recomendaciones frente a los hurtos o robos en fiestas o eventos
Conviene guardar las pertenencias, teléfonos móviles, carteras, documentación, etc. en los bolsillos o compartimentos interiores del bolso. No hay que dejar estos objetos a la vista, ni en las mesas o lugares al alcance de los posibles carteristas.
Aunque cada vez es menos habitual, sobre todo en las personas jóvenes, si extraemos dinero en un cajero automático hay que bloquear con nuestro cuerpo la visión de posibles extraños y guardar el dinero cuanto antes, sin mostrarlo en nuestras manos.
El bolso tiene que estar bien asido y pegado al cuerpo para evitar los "tirones". Prevenir también, a ser posible, la sustracción de cadenas de oro del cuello mediante el mismo método del tirón.
En las aglomeraciones desconfiar de las personas que se sitúan junto a nosotros, más si notamos alguna actitud sospechosa o si portan una prenda de vestir plegada en sus manos para disimular.
Es importante no alejarse de la cuadrilla de amigos y menos a lugares apartados o con poca iluminación. Hay que estar acompañado siempre, porque los autores de robos con violencia, intimidación, u otros delitos suelen aprovechar la vulnerabilidad de la víctima cuando está sola.
Recomendaciones para evitar robos en domicilios
Si va a ausentarse de su vivienda, por vacaciones o por otro motivo, no lo comente ante desconocidos. Asegúrese de que deja la puerta bien cerrada y no deje avisos en la puerta ni mensajes en el contestador automático informando de su ausencia.
En líneas generales, resulta recomendable ponerse en contacto con un profesional cerrajero que le asesore sobre la mejor seguridad para la puerta de su domicilio. En este sentido, resulta importante la instalación de un bombín y un escudo de seguridad para evitar fracturas destructivas. Existen modelos magnéticos que evitan la introducción de una llave mediante bumping o impresioning, modus habituales utilizados por los ladrones.
Estar alerta a posibles marcadores o señales en las puertas.
Encargue a algún familiar o vecino que le recoja el correo y que le abra o cierre persianas. Facilite a alguien de confianza su posible localización en caso de necesidad.
Asegurar ventanas u otros accesos en bajos, así como en viviendas unifamiliares. No olvidar otros accesos como azoteas o garajes y esperar a que se cierren las puertas.
Es importante comunicar al teléfono de emergencias 112, Ertzaintza o policía local, movimientos extraños o ruidos anormales en casas de vecinos, o presencia de sospechosos en comunidades o urbanizaciones.
En caso de encontrarnos con los ladrones hay que evitar cualquier confrontación y dar aviso inmediatamente al teléfono 112.
