La empresa que presta el servicio, el Grupo Transitia, se niega a abordar la mejora de las condiciones de la plantilla que llevan ya diez años con las mismas condiciones, es decir, con el convenio congelado. La plantilla del KBUS exige la renovación con incrementos salariales por encima de IPC, mejoras sociales y otras cuestiones de necesidad organizativa.
Desde ELA se han mantenido reuniones con distintos grupos políticos del Ayuntamiento de Barakaldo para explicarles cuál es la situación y advertir de la necesidad de llegar a un acuerdo con el fin de que no se genere un conflicto que afecte al municipio. Pero si la situación de bloqueo persiste, se incrementarán las movilizaciones en las próximas semanas.