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Cruz Roja tramita cheques de ayuda del Gobierno Vasco de entre 150 y 300 euros para familias sin recursos

Barakaldo, 13 ene 2023. "Cualquier delegación de Cruz Roja" es el lugar para tramitar el nuevo programa de "ayuda urgente" que, con 2,5 millones de euros, ha puesto en marcha el Gobierno Vasco destinado a "garantizar el acceso a alimentos o productos de higiene personal" a familias "en situación de extrema vulnerabilidad", que recibirán cheques de entre 150 y 300 euros, en forma de tarjetas monedero, para utilizar en determinados supermercados.

El proyecto prevé también facilitar a estas personas la adquisición con un descuento a partir del 50% y  hasta el 70% de "alimentos en perfecto estado que los comercios no han logrado vender a lo largo del día". Esta rebaja se podrá tramitar a través del programa para el teléfono móvil —app— 'Encantado de comerte'.

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Comunicado del Gobierno Vasco
10.000 personas en situación de extrema vulnerabilidad recibirán ayuda urgente para hacer frente a sus necesidades básicas
  • El Gobierno Vasco prevé garantizar el acceso a alimentos o productos de higiene personal a unas 2500 familias
  • Enmarcada en el programa Hitzartuz, la partida presupuestaria destinada a esta iniciativa asciende a 2.500.000 €
  • Los importes entregados oscilarán entre los 150 € y los 300 €, y se realizarán como máximo 3 entregas por año
  • Las ayudas, que pueden solicitarse desde el 1 de enero en cualquier delegación de Cruz Roja Euskadi, serán canalizadas a través de tarjetas monedero y una aplicación móvil
La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, ha presentado esta mañana en Vitoria-Gasteiz el nuevo programa de atención urgente a las necesidades básicas de personas y familias que se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad.

El Ejecutivo vasco cuenta para esta iniciativa con una partida presupuestaria que, enmarcada en el programa Hitzartuz, asciende a un total de 2.500.000 €. Con ella prevé llegar, tal y como ha anunciado la consejera, a “unas 10.000 personas en los tres territorios históricos de la CAE; lo que se traduce en aproximadamente 2500 familias a las que podremos garantizar el acceso a bienes y servicios de carácter esencial”.

En función de la valoración individualizada que se haga de cada caso y del número de miembros que integren la unidad de convivencia, los importes entregados oscilarán entre los 150 € (para unidades familiares de un miembro) y los 300 € (para unidades familiares de 4 o más miembros). Se realizarán, como máximo, 3 entregas por año; excepto en casos de vulnerabilidad severa, que serán oportunamente estudiados.

En el complejo momento actual, en el que un buen número de hogares vascos sufren de forma especialmente acentuada las consecuencias derivadas de acontecimientos globales como la pandemia de COVID-19 o la larga guerra en Ucrania, el Gobierno Vasco sigue así, ha expuesto Artolazabal, “leal a su compromiso de no dejar a nadie atrás”. Y es que el encarecimiento del coste de la energía y el incremento progresivo del precio de artículos y servicios de carácter esencial “pueden llegar a convertir algunas necesidades básicas en inaccesibles para las personas y familias más vulnerables o en riesgo de exclusión”, ha explicado.

Tarjeta monedero y app

Cruz Roja Euskadi es, desde el 1 de enero y a través de cualquiera de sus delegaciones territoriales, la entidad encargada de coordinar la solicitud, revisión de requisitos y tramitación de estas ayudas. Tal y como ha explicado su coordinador autonómico, Aitor Allende, tras identificar las demandas de las personas solicitantes, “se hará una valoración de cada caso y una revisión de la documentación aportada, antes de diseñar un plan personalizado de intervención”.

Allende ha concretado que “serán destinatarias de estas ayudas personas o familias con dificultades para cubrir sus necesidades por ingresos nulos o insuficientes, sin distinción alguna en función del origen, siempre que cumplan los requisitos; tendrán prioridad de admisión las familias que no tengan ningún ingreso y se valorarán las situaciones agravantes, como cargas familiares, cargas económicas (deudas, alquileres…) y situaciones excepcionales”.

Este nuevo programa de ayudas, ha añadido la consejera Artolazabal, “centrará de forma especial su atención en los hogares en los que residan menores o personas solas en situación de extrema vulnerabilidad; sin perder tampoco de vista el mayor riesgo de pobreza y exclusión que sufren las mujeres en todos los grupos de edad, así como las personas mayores”.

Las ayudas, destinadas a la cobertura urgente de necesidades tan esenciales como una adecuada alimentación o el acceso a productos de higiene personal, serán distribuidas mediante dos vías combinables entre sí. Por un lado, se entregarán unas tarjetas monedero que podrán ser utilizadas en supermercados Eroski, Mercadona y Carrefour y en pequeños comercios de proximidad. Por otro lado, las ayudas se canalizarán también a través de una aplicación móvil desde la cual las personas destinatarias podrán adquirir alimentos en perfecto estado que los comercios no han logrado vender a lo largo del día, beneficiándose de una rebaja de hasta un 70% sobre el precio original.

Con la habilitación de las tarjetas monedero, y, sobre todo, la canalización de las ayudas a través de la app Encantado de comerte, en la que las personas destinatarias conviven con personas ajenas al programa, se evita también, en palabras de Beatriz Artolazabal, “cualquier riesgo de estigmatización”.

Empoderamiento

Si bien el objetivo prioritario de esta iniciativa es la atención urgente a las necesidades básicas de las personas y familias más vulnerables, así como la detección de otras necesidades a las que se dará respuesta mediante la derivación, la orientación y la coordinación con los recursos más adecuados, este programa cuenta también con un enfoque pedagógico. Así, busca mejorar los hábitos de consumo, concienciar sobre el impacto social y ambiental del consumo del agua o la energía, promover la adquisición de buenos hábitos ambientales o contribuir a mejorar la educación alimentaria y nutricional.

En palabras de la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, el objetivo es “trabajar junto con las personas destinatarias en la transformación de las situaciones que comprometen su acceso a bienes y servicios de primera necesidad, en el desarrollo de diferentes competencias y en la búsqueda de cambios profundos que permitan no solo ofrecer respuestas básicas de emergencia, sino alcanzar soluciones que, una vez consolidadas, puedan mantenerse en el tiempo”.

El modelo por el que apuesta el Gobierno Vasco, ha insistido Artolazabal, “coloca a las personas en el centro de cualquier intervención; promueve que las personas destinatarias puedan liderar su propio proceso de cambio, promoviendo su autonomía y brindándoles el apoyo, la orientación, la mediación y el acompañamiento necesarios en el camino hacia la inclusión”.