- Comencemos por La Ley de los llamados Planes Privados de Empresa, dinero público de gestión privada para complementar las mejores pensiones y que son torpedos en la línea de flotación del Sistema Público de Pensiones. Este producto financiero se denomina EPSV en Euskadi donde es pionero, y referente para el resto del Estado.
- Sigamos con el caballito de la galopante inflación, que en 2022 ha destrozado y sigue destrozando las economías de las familias y personas con menor poder adquisitivo.
- Y por último mencionemos un caballo que nos afecta directamente a todos, en especial a los mayores y que es el deterioro progresivo y la Privatización de la Sanidad Pública. En Euskadi Osakidetza.
Hay muchos caballos más, pero quizás este último, el de la Sanidad es el más incontrolable porque nos pasamos media vida mendigando salud y atención, que no dependen de nosotros.
Y como para muestra, dicen que un botón basta, mencionamos un artículo de Marta Macho del pasado domingo en eldiario.es https://www.eldiario.es/euskadi/blogs/viento-del-norte/pataleta-jefes- servicio_132_9782062.html titulado “La pataleta de los jefes de servicio”
Recogemos unas pinceladas de dicho artículo
Osakidetza, nuestro servicio público de salud, se derrumba. Su estructura está apolillada desde el inicio de su existencia. El tejido vivo lo formamos los trabajadores rasos y los pacientes, desautorizados ambos en la toma de decisiones en el ámbito sanitario. Los pacientes han sido convertidos en sujetos pasivos, meros usuarios de un servicio más.
Uno de los principales factores condicionantes de la salud es la situación socioeconómica, la clase. Por ello, la lucha por una Sanidad pública comunitaria, universal, gratuita y de calidad es una lucha política, que no partidista, porque supone una lucha por la justicia social. En la actual fase de crisis, el capital necesita mercantilizar absolutamente todo lo que pueda generar ganancia: Sanidad pública, cuidados, educación. Esto se traduce en que la atención sanitaria dependerá de la posición social del paciente, habitaciones lujosas para unos y muerte por inasistencia para otros. Y como ejecutores de este sistema están aquellos que tienen intereses privados, los asiduos a las puertas giratorias y todos los que funcionan como sus herramientas, desde la punta del tejado hasta las vigas.
En conclusión, la pataleta de la que somos testigos, está causada porque la cúpula de Osakidetza ha decidido capar algunos poderes de los capataces que ven en peligro su cortijo. Nada tiene que ver con la lucha por una Sanidad pública que se mueve desde hace años desde trabajadores, sindicatos y población. Pueden dimitir y destituir a todos los altos cargos y a todas las jefaturas de servicio. La asistencia sanitaria seguirá adelante y podremos lograr una organización más democrática.
Por lo tanto desde esta Plataforma de Barakaldo, apoyamos y apoyaremos a los trabajadores y trabajadoras que defiendan una Sanidad Publica y de Calidad, y además seguiremos insistiendo en nuestras reivindicaciones prioritarias en materia de pensiones:
1- Para reducir la brecha de género y la pobreza en las pensiones: equiparación pensión mínima = salario mínimo
2- Para evitar que aumenten las diferencias entre pensiones: reparto de las mejoras, sin porcentajes.
¡GOBIERNE QUIEN GOBIERNE LAS PENSIONES Y TODO LO PUBLICO SE DEFIENDEN! ¡EL PUEBLO INFORMADO Y CONCIENCIADO JAMAS SERÁ DOBLEGADO!
Barakaldo a 14 de diciembre de 2022