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Seis años estuvo funcionando en Los Fueros la red que obligaba a prostituirse a mujeres latinoamericanas

Barakaldo, 3 abr 2022. Al menos durante seis años, sin que nadie alertara al respecto, estuvo funcionando en pleno centro de Barakaldo, en el paseo de los Fueros, el piso en el que en diciembre de 2019 fue desmantelada una red internacional que se dedicaba a obligar a mujeres latinoamericanas a ejercer la prostitución.

Los datos han quedado al descubierto en una auto de la Audiencia Provincial de Bilbao que niega la libertad provisional a uno de los varones detenidos en esta operación policial, que se desarrolló el 16 de diciembre de 2019, con el resultado de una docena las víctimas liberadas y una quincena los detenidos en una intervención internacional entre Roma y Barakaldo, con la localidad vizcaína como sede de la organización criminal.

En el documento judicial se indica que el presunto explotador sexual "controlaba físicamente el piso de Barakaldo y decidía sobre las condiciones de trabajo (sic) de las mujeres que había allí, imponiendo horarios, limitando las salidas y controlándolas por videovigilancia". El magistrado señala además como fechas de referencia desde el 1 de enero de 2014 hasta el 16 de diciembre de 2019.

En este periodo de prácticamente seis años, el acusado "no ha tenido ningún ingreso justificado y los pagos efectuados en metálico por el mismo dan como resultado un gasto no justificado de 42.775,40 euros, provenientes de su actividad como miembro de la trama dedicada a la trata y explotación sexual de las perjudicadas".

El presunto delincuente está acusado de prostitución coactiva con la agravante específica de pertenencia a grupo criminal, un delito de inmigración ilegal con ánimo de lucro y un delito de trata de seres humanos. Las víctimas llegaban a Europa desde Venezuela o Colombia, "donde ya se dedicaban a la prostitución debido a la situación de necesidad en la que se encontraban".

La trama controlaba sus ingresos, "destinando una parte de cada servicio sexual efectuado a sufragar el importe del pasaje y el resto, al pago del alquiler del piso". Las mujeres sexualmente explotadas "no podían rechazar clientes, las televigilaban, teniendo restringidas las salidas y los contactos telefónicos", señala el auto judicial, que habla además de "indicios de blanqueo de capitales".

En los seis meses desde diciembre de 2019 hasta junio de 2020 fueron desmanteladas en Barakaldo tres tramas distintas de explotación sexual de mujeres. El 16 de diciembre fueron al menos 12 las víctimas rescatadas, el 27 de enero de 2020 fueron libertadas cuatro mujeres de Paraguay y el 17 de junio fueron otras cuatro las víctimas rescatadas de un piso en la calle Nervión número 8.

Archivo

Comunicado de la Guardia Civil el 17 de diciembre de 2019
La Guardia Civil libera a 12 mujeres víctimas de explotación sexual
  • Esta organización criminal confinaba a sus víctimas en pisos ubicados en la localidad de Barakaldo y en Roma (Italia)
  • El operativo ha sido coordinado entre Guardia Civil y Polizia di Stato, se han efectuado 15 detenciones y 6 registros en España e Italia
  • El grado de sometimiento de las víctimas era extremo, llegadas a ser drogadas y controladas por cámaras que emitían en directo

La Guardia Civil en el marco de la Operación TRILLÓN ha desmantelado una Organización Criminal dedicada a la Trata de Seres Humanos con fines de Explotación Sexual en la que se ha logrado liberar a 12 mujeres que se encontraban en el momento de la intervención bajo su control. Durante la actuación se han practicado las detenciones de 15 individuos pertenecientes a la trama criminal a quienes se les atribuye la presunta autoría de los delitos de Trata de Seres Humanos, Prostitución Coactiva, Inmigración Ilegal y Organización Criminal, teniéndose previstas más detenciones.

El Operativo para la liberación de las víctimas se ha desarrollado de forma coordinada entre Guardia Civil y la Squadra Mobile di Roma de Polizia di Stato, llevando a cabo 6 entradas y registros simultáneas en domicilios ubicados en las ciudades de Roma y Barakaldo, localidad esta última donde la cúpula de la Organización se encontraba afincada y desde donde dirigía las actividades de la misma.
Grado extremo de sometimiento

La trama criminal desarticulada, se servía de mujeres procedentes principalmente de Venezuela y Colombia, que abusando de su situación de vulnerabilidad y pobreza eran instadas para que abandonaran sus países de origen, trasladándolas en vuelos hasta Italia y España. Una vez en el continente europeo, las mujeres eran distribuidas entre diferentes pisos situados en la localidad de Barakaldo en España y de Roma en Italia, donde eran explotadas sexualmente bajo el control de la Organización.
 
Cada poco tiempo eran intercambiadas entre los diferentes pisos y ciudades con el propósito de provocar un desarraigo que permitía un mejor control sobre ellas, y para "ofertarlas" como novedad con el fin de atraer un mayor número de clientes. Se han llegado a contabilizar más de 30 mujeres que han pasado por el control de esta Organización en los últimos 2 años.
 
Durante la investigación se ha constatado un confinamiento total de las víctimas en los pisos donde ejercían, con apenas tiempo para dormir y siempre bajo el dominio total de la Organización sirviéndose de individuos que se encargaban de su vigilancia y cámaras que emitían en directo instaladas en los pisos donde residían y eran explotadas sexualmente. Lo anterior era complementado mediante coacciones por su situación irregular en el país y amenazas, incluso con armas de fuego, ejerciendo así un control total sobre ellas.
 
Además, obligaban a las víctimas a realizar todo tipo de prácticas sexuales a demanda de los clientes, controlando tanto los tiempos de trabajo como su recaudación, incluso las indicaban que consumieran drogas con los mismos para estar más tiempo en su compañía y obtener así un mayor beneficio.
 
Los detenidos, en su mayoría de origen sudamericano y asentados en la localidad de Barakaldo, se servían de varios vecinos vizcaínos de su confianza para realizar los transportes ya que eran conocedores de la zona.
 La investigación ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción Nº4 de Barakaldo (Bizkaia) y en ella han participado agentes de la Guardia Civil de la Zona del País Vasco y de la Unidad Central Operativa (UCO)  apoyados por componentes del Grupo de Acción Rural de la Guardia Civil.