Se mostraron críticos con los atrasos de 2021 que recibirán esta semana (la llamada “paguilla”) ya que según sus portavoces no llega a compensar el incremento del coste de la vida del pasado año. Pues mientras que éste último se ha incrementado en un 5,6 %, aquélla no supera el 2,5 % (en algunos casos el 3 %) por lo que, afirman, la diferencia es pérdida de poder adquisitivo. Pusieron un ejemplo: en una pensión de 1.300 €, los citados atrasos serán de 291,2€, en vez de ser 837,4 %. Lo malo, dicen, es que en adelante, el incremento de las pensiones se va a hacer con la misma fórmula; por lo que dicha pérdida se perpetuaría en el tiempo.
Acusan al actual gobierno de incumplir sus promesas electorales, ya que de ningún modo consideran revalorizadas sus pensiones (promesa electoral), y aseguran que la mal llamada “Ley de Revalorización de Pensiones” de 2021 les aleja aún más de unas pensiones dignas suficientes y justas, cuyo mínimo debería ser 1.080 €; Según sus portavoces, además se perpetua la brecha de género en salarios y pensiones y no se derogan los coeficientes reductores de la jubilación anticipada con 40 años cotizados. Afirman que lo peor estaría por llegar: la privatización de las pensiones. Según ellos, como alternativa a los recortes, el Gobierno del Estado pretendería poner en marcha un sistema complementario de pensiones en manos de las entidades financieras del que sólo se beneficiarán los salarios más altos, y los bancos.
Añaden que con la más que probable aprobación de la no-reforma laboral que con toda seguridad verá la luz verde la semana que viene, los trabajadores y trabajadoras se van a jubilar cada vez más tarde y con una pensión más baja.
El MPEH dice negarse a aceptar esta situación, y promete seguir en la lucha el año 2022 y ”hasta que nuestros gobernantes tomen las decisiones que no se han atrevido a tomar en el 2021.” Afirman que estarán al lado de todas las iniciativas para mejorar pensiones, salarios y condiciones laborales de trabajadores en activo, como lo hicieron ayer mismo en las calles de las capitales de la CAV, a favor de una sanidad primaria de calidad.
Finalmente recordaron sus reivindicaciones: derogación total (que no reforma) de las leyes de pensiones de 2011, 2013 y 2021. Revalorización de las pensiones en base al IPC REAL, Pensión mínima de 1080€ y salario mínimo de 1200€ para poder sostener las primeras; mientras tanto, petición a los gobiernos vasco y navarro que complementen las pensiones hasta dichas cantidades; supresión de coeficientes reductores,… entre otras.
Con la intervención musical de Rosa Ramos ("no nos mires, únete") se cerró el acto, dándose cita para el próximo lunes 31 de enero, cada cual en su plaza.
