publicidad

Elena Fernández Alonso | novelista
"La impostora' confirma que mi dedicación a la escritura no es un hecho casual"

Elena Fernández, en la presentación de 'La impostora' en la librería Milo's
Barakaldo, 9 dic 2018. Dos años de trabajo ha supuesto para la barakaldesa Elena Fernández su nueva y segunda novela, 'La impostora'. Son 250 páginas y de nuevo hay un crimen que convierte otra vez en investigadora a la protagonista de su primera obra, 'Cerezas amargas'. Aunque mezcla de géneros, 'La impostora' reúne los ingredientes habituales de la novela negra y lo hace con perspectiva de mujer.

Quienes disfrutaron con 'Cerezas amargas' reconocerán en la nueva novela el estilo de la escritora barakaldesa, que esta vez ambienta la trama en Bilbao y en Dima, además de alguna escena en la anteiglesia. La historia no escapa de la actualidad y en ella se encuentran cuestiones a temas candentes, como la inmigración, el desempleo o la trata de mujeres.

El trabajo se puede comprar por 18,50 euros en castellano y 17 en euskera en prácticamente todas las librerías de Barakaldo. La obra ya se ha presentado en Milo's, el día 13 de diciembre hay un acto en Minerva y 17 de enero será en Denetariko.


Elena Fernández
Pregunta. La Feria de Durango del disco y libro vasco anuncia 'La impostora' como una novela negra. ¿Está de acuerdo con la clasificación?
Respuesta. La novela negra, como el resto de géneros literarios, ha evolucionado mucho en los últimos años. Una tendencia lógica y positiva en mi opinión. En este sentido, 'La impostora' es una mezcla de varios géneros que se complementan. Sin embargo, cuenta con los ingredientes básicos de la novela negra: el asesino, la protagonista convertida en investigadora sin pretenderlo y el lugar donde se ambienta la acción. Además, de todo ello se cuenta una historia concerniente a la protagonista, y los lugares donde se ambiente también cobran relevancia.

P. Como ya sucediera en su primer trabajo, 'Cerezas amargas', una mujer es protagonista, de nuevo hace frente a la injusticia y es una historia de superación. ¿Es correcto indicar que el feminismo es parte fundamental de sus novelas?
R. En la novela confluyen diversos aspectos que se repiten al igual que en 'Cerezas amargas'. Aparte de la intriga que envuelve la acción, trata muchos temas de actualidad, problemas sociales del día a día como la inmigración, el paro o la trata de mujeres. Además está contado desde una perspectiva de mujer, en respuesta a la pregunta. De hecho, la situación a la que se enfrenta la protagonista por ser mujer es el leitmotiv de la novela. La protagonista, la misma que en la novela anterior, hace frente a un reto en su trabajo debido a su situación personal. También se ve envuelta en una situación trágica, una serie de asesinatos en el entorno, que sin quererlo la convertirán en una investigadora casual.

P.  Han pasado exactamente dos años desde que presentara las 300 páginas de 'Cerezas amargas'. Como en esta ocasión, fueron 24 meses de trabajo. Estas vez son 250 páginas. ¿Qué es lo que más esfuerzo le ha costado en el proceso de esta novela?
R. En efecto, han sido otros dos años de trabajo porque desde que publiqué la anterior novela ha existido un continuo trabajo de investigación, de creación de personajes y de ideas. Creo que la mayor dificultad ha consistido en encontrar el lugar adecuado para ambientar la novela, y en la manera de crear la trama. Tenía ideas muy claras que quería introducir en el texto, pero necesitaba una cohesión entre todas ellas. Me costó dar con la manera de unir la acción con los personajes y con la idea central.

Elena Fernández
P. ¿Qué diferencia ha sentido en la escritura respecto a 'Cerezas amargas'?
R. La principal ha sido que contaba con una experiencia anterior para lo bueno y para lo malo. Es decir, la parte positiva es que la experiencia anterior me ha dado herramientas de cara a la actual, para corregir errores y mejorar ciertos aspectos. La negativa, la presión porque esa intención de mejorar no saliera bien. Se supone que un segundo libro tiene que mantener al menos el nivel del anterior. La gente que disfrutó con el anterior espera encontrar un texto que le llene de la misma manera. Es una tarea difícil porque se trata otra temática y la interacción entre los personajes también cambia con este nuevo escenario. Hay existe el riesgo de perder en el intento.

P. ¿Reconocerán sus lectores el estilo Elena Fernández o 'La impostora' es algo totalmente nuevo?
R. En realidad he intentado mantener el mismo estilo, porque existe una pequeña conexión con la novela anterior. Aunque la acción y el tema de fondo obligan a contarlo de otro modo, se mantiene la primera persona y el tono. El lector reconocerá el estilo a pesar de las variantes.

P. El hallazgo de un expediente de un crimen machista ocurrido hace 300 años le empujó a escribir 'Cerezas amargas' ¿Qué le ha inspirado en esta ocasión?
R. En esta ocasión me han inspirado muchos lugares y temas. Pero el principal es un tema relacionado con el título, el motivo básico de la novela y en torno al que gira su contenido. Ahí lo dejo, sin más explicaciones para no desgranar demasiados detalles.

Portada de la La impostora
P. ¿Cuánto y cómo ha tenido que investigar para desarrollar esta novela?
R. Esta vez también he realizado una parte de investigación histórica. Aunque en menor medida aparece una historia de tiempo atrás que sirve de conexión con la novela anterior. Aparte de eso, se tratan varias temáticas sobre las que he leído y me he informado. Y, por último, respecto a los lugares donde transcurre la trama, a acción principal se desarrolla entre Bilbao y el municipio de Dima. Se trata de dos lugares conocidos, pero con muchos matices. Dima es un lugar maravilloso lleno de tradiciones, me ha encantado conocer más sobre la pueblo y me he quedado con ganas de profundizar en todo ello. En cuanto a Bilbao, se centra en la calle Las Cortes, un lugar polémico donde siempre hay mucho que aprender. Y por último, una mínima parte transcurre en Barakaldo con la consiguiente parte de investigación.

P. ¿Qué cree que van a sentir los lectores al enfrentarse con 'La impostora'?
R. Por los comentarios hasta el momento, con gran expectación. Tanto el título como la ilustración de la portada han generado intriga, que era el propósito. En ese sentido, estoy contenta. Habrá que esperar a la reacción tras la lectura.

P. Ya son dos novelas. ¿Se ve escritora? ¿Siente que podría dedicarse sólo a la escritura?
R. Uf. Eso son palabras mayores. Es verdad, que una segunda novela supone un paso enorme. La primera ya es un paso gigante, porque aunque el resultado fuera malo existe un trabajo de muchas horas. Después de ese paso, la llegada a un segundo confirma que no ha sido un hecho casual. Sin embargo, no es mi propósito vivir de ello y sería muy difícil, en todo caso. La consideración de escritora como alguien que escribe es evidente, pero no como profesional.

P. ¿Cuáles son su próximos proyectos? 
R. La presentación de la novela es esta semana. El objetivo principal es la presencia en la feria del libro y disco vasco de Durango, a celebrar del día 5 al 9 de diciembre. Y ya tengo varias presentaciones concretadas. La primera se ha realizado en la librería Milo’s de Barakaldo el día 4, después en la librería Minerva de Barakaldo el día 13 de diciembre. Y también en Barakaldo el día 17 de enero en la librería Denetariko. Fuera de aquí, la primera será en Dima el día 14 de diciembre, y en la cafetería Emeki de Galdakao el día 19 de diciembre. Todavía tengo alguna más por concretar e iré informando a través de las redes sociales.

P. ¿Ya piensa o escribe una nueva novela o cambiará de genero?
R. De momento tengo varias ideas, pero aún no pienso en ponerme a escribir. Me siento cómoda en este estilo, pero por la experiencia de lectora sé que nos cansamos de los escritores cuando sus novelas se repiten en una misma línea. Lo valoraré en su momento.