Con un cuarteto de jóvenes gogós improvisando en el escenario, los niños han movido el esqueleto en la verbena infantil al ritmo de las canciones del verano, los clásicos de discoteca y los éxitos del momento. La hipnótica coreografía del ‘Swish swish’ de Katy Perry, ‘Sofía’ de Álvaro Soler y la mítica ‘Soy una taza’ han abierto una velada familiar.
