La Audiencia Provincial de Bizkaia ha condenado a tres años y seis meses de prisión a un varón que en julio de 2015 disparó con una pistola detonadora manipulada al portero del pub Mendigo, que no recibió el impacto del disparo. La sección primera de la Audiencia Provincial ha condenado a este individuo a dos años y seis meses de prisión por un delito de homicidio en grado de tentativa y a un año por tenencia ilícita de armas.
Según se recoge en la sentencia, este varón en compañía de otro acudió al pub Mendigo y en el exterior, donde se encontraba el portero, "efectuó dos o tres disparos al aire" antes de que su acompañante se abalanzase sobre el portero y le propinase un puñetazo en la cara. En ese momento, el individuo que portaba el arma "apuntando desde una distancia de escasos 2 metros a la caja torácica" del portero "con ánimo de acabar con su vida, efectuó otro disparo que no llegó a impactar en la víctima".
El arma utilizada era una pistola detonadora con el número de serie borrado que había sido manipulada, "dado que mediante mecanizado le había sido retirada la pieza de metal duro que obstruía parcial mente el ánima del cañón, quedando preparada para poder disparar cartuchos detonadores con proyectil".
Además, el ahora condenado había adquirido cartuchos, de tipo salvas, detonadores o de fogueo, manipulados, mediante la retirada de la lapa de plástico verde, y se les ha introducido junto a la pólvora, un fieltro de esponja para aumentar la presión y a continuación una bola de acero de 8 milímetros de diámetro y 2,08 gramos de peso cada una a modo de proyectil. La sentencia señala que "si tales proyectiles son disparados a cañón tocante o a corta distancia en zonas vitales del cuerpo humano son capaces de causar la muerte".
El acompañante del varón que efectuó los disparos, y que golpeó al portero, ha sido condenado por un delito leve de maltrato de obra a la pena de un mes de multa con una cuota diaria de 3 euros, con arresto sustitutorio de un día por cada dos cuotas no satisfechas.
