• Quieren convertir al Ayuntamiento en la "casa de todos" • Abogan por un consistorio menos burocratizado • Consideran que pueden seguir sumando apoyos en próximas convocatorias electorales •
Bildu Barakaldo llega al Ayuntamiento con el objetivo de "no defraudar" a sus electores y convertir a la institución municipal en "el primer muro de defensa" frente a las políticas neoliberales y ha asegurado que están "abiertos a hablar y dialogar con todos los partidos" porque de lo contrario "habría vecinos que no lo entenderían". Tras las elecciones del pasado domingo, Bildu ha ofrecido su primera rueda de prensa en la Herriko Plaza y ha asegurado que no llegan para "perpetuarse en el poder" ni vivir permanentemente de la política. Ningún partido se ha puesto todavía en contacto con ellos, pero aseguran que antes de decidir cualquier tipo de pacto tendrán que conocer cuáles son sus propuestas y proyectos para el municipio. Además, han destacado que los vecinos "han castigado con su voto las políticas antisociales" del PSE y han afirmado que el "oscurantismo" en la gestión y la "prepotencia", "despotismo" y "mala imagen" del alcalde han hecho que los socialistas hayan perdido 6.000 votos.
"No negaremos la palabra a nadie, aunque las diferencias de contenidos programáticos dificultará la consecución de acuerdos", afirman los representantes de Bildu, que ha logrado cuatro concejales en las elecciones del domingo y que aseguran que van a asumir las reivindicaciones de cada barrio e impulsar desde el Ayuntamiento las políticas sociales.
"Abogamos por un cambio a nivel político, social y económico, pero el diálogo es la base de la democracia", ha señalado el cabeza de lista, Jorge García, sobre la intención de Bildu de hablar con todos los partidos y la dificultad de llegar a acuerdo.
Ha recordado los más de 8.000 parados que hay en el municipio y los miles de vecinos con trabajos precarios. Por ello quieren que el Ayuntamiento esté preferentemente abierto a las personas a las que más afecta el desempleo, la precariedad laboral y el deterioro de los servicios sociales.