Detenido el autor de la falsa amenaza de bomba en los juzgados

Agentes de la Ertzaintza detuvieron este sábado al presunto autor de la amenaza de bomba registrada el viernes en los juzgados de Barakaldo y que provocó un caos circulatorio en el centro de la anteiglesia. El arrestado, un hombre de 36 años de edad, ya había utilizado esta misma fórmula en febrero para evitar, como en esta ocasión, una vista por violencia doméstica. Nota de prensa de la Ertzaintza Detenido el autor de la falsa amenaza de bomba de ayer en los juzgados de Barakaldo Efectivos de la ertzainetxea de Sestao han detenido durante la mañana de hoy, sábado, a un varón de 36 años acusado de realizar ayer un falso aviso de bomba en el Juzgado de Barakaldo, tras el cual la zona permaneció acordonada durante dos horas. De las investigaciones llevadas a cabo, se ha podido determinar también la presunta participación del ahora arrestado en otra falsa alerta llevada a cabo en el mismo lugar el pasado mes de febrero. Poco antes de las nueve y media de la mañana de ayer, viernes, un comunicante anónimo que llamaba desde una cabina telefónica contactó con el teléfono 112 SOS Deiak, para alertar de la colocación de un artefacto en el Juzgado de Barakaldo. Por este motivo se procedió a desalojar dichas dependencias y acordonar la zona, realizándose una inspección con resultado negativo. Al no localizar objeto alguno susceptible de ser una bomba y pasado un tiempo prudencial, alrededor de las once y media se levantó el dispositivo de seguridad. La Ertzaintza de inmediato puso en marcha una investigación encaminada a poder determinar la identidad de la persona que había realizado este falso aviso de bomba y como resultado de las indagaciones, a primeras horas de la mañana de hoy, sábado, se ha procedido a la detención de un varón de 36 años que responde a las iniciales de O.G.G., como presunto autor de la llamada. Al detenido se le va a imputar también por otra falsa amenaza de bomba realizada el pasado mes de febrero en el mismo Palacio de Justicia. Se da la circunstancia de que tanto en esa fecha como en el día da ayer, el arrestado debía comparecer en los juzgados en relación a algún asunto de violencia doméstica y, al parecer, con el fin de evitar acudir a dichos juicios pudo efectuar las llamadas.