Barakaldo, 06 NOV 2018. Los sindicatos ESK, ELA, UGT, CC OO, LAB, y SAE han denunciado un recorte de seis auxiliares de enfermería en la Unidad de Partos debido al descenso de nacimientos. Los sindicatos han señalado que la gerencia del hospital, que niega los hechos, ha decidido esta reducción y han advertido de que afectará a la calidad asistencia.
Las centrales sindicales han reclamado que haya una auxiliar de enfermería por cada matrona y que se recupere al celador del turno de noche "recortado con anterioridad".
Nota de prensa de los sindicatos del hospital de Cruces
EL HOSPITAL DE CRUCES RECORTA AUXILIARES DE ENFERMERIA DEL AREA DE PARTOS
Los sindicatos ESK, ELA, UGT, CCOO, LAB, y SAE del hospital de Cruces denuncian que la Gerencia del hospital de Cruces ha decidido recortar la plantilla de auxiliares de enfermería (TCAE) en la unidad de Partos debido a la disminución del número de partos. Un recorte de 6 auxiliares de enfermería, una por turno de trabajo. Apoyándose exclusivamente en criterios economicistas que dejan de lado los criterios de calidad asistencial.
Las razones aportadas se apoyan exclusivamente en la estadística. En la disminución de los partos que se realizan en nuestra unidad. Una razón que empieza y termina en fríos datos estadísticos que dejan fuera un análisis más preciso del trabajo que las auxiliares de enfermería realizan. Tanto en las labores propias de este colectivo como las que realizan dentro del equipo de trabajo del que forman parte.
Siempre hemos considerado que la dotación de auxiliares de enfermería en el área de partos era insuficiente. Nuestra valoración es que la plantilla del área de partos debería ser suficiente para garantizar trabajar con equipos multidisciplinares de trabajo en los que hubiera una auxiliar de enfermería por matrona. Unos equipos de trabajo que permitieran trabajar en términos de calidad y de seguridad tanto para la mujer parturienta como para el personal implicado.
La falta de una auxiliar de enfermería en muchos turnos de trabajo ha supuesto que las auxiliares de enfermería se hayan visto sometidas a una fuerte presión psicológica por el aumento del riesgo a cometer errores y no poder atender todas las demandas del servicio. En muchas ocasiones se han producido quejas de otros colectivos por la imposibilidad de atender las necesidades y por las dificultades de realizar el trabajo en términos de calidad.
La decisión actual de recortar una auxiliar por turno va a favorecer el aumento de estas situaciones deteriorando la calidad asistencial.
Si bien es innegable la disminución de los partos en los últimos años, también es innegable que el trabajo en el área de Partos ha evolucionado mucho, incorporando nuevas tareas y haciendo éstas más complejas.
El proceso de recepción, evolución y parto en las mujeres ha variado mucho en tiempos y procedimientos. Las mujeres que acuden al servicio son pacientes más complejos, con ratios de edad más avanzados y con mayores necesidades asistenciales (ovodonación (Fiv), preeclamsias, prematuridad, por lo que requieren más atención de hospitalización y acompañamiento antes, durante y después del parto).
Cada vez hay más partos con intervención del ginecólogo, que exigen la presencia de la auxiliar de enfermería durante todo el tiempo en el paritorio.
En los últimos años han tenido un aumento de sus tareas y procedimientos a realizar. Cada vez se hacen más pruebas, como por ejemplo el “PH a las parturientas durante la dilatación”, que requieren de su presencia durante un tiempo importante.
El Servicio de Partos es un servicio de Urgencia que requiere estar dotado de personal suficiente y capacitado para atender procedimientos graves, con rapidez y destreza. Hay que tener en cuenta que, precisamente por ser un servicio de Urgencias, es imposible realizar una planificación de los recursos y se presentan a menudo situaciones en las que, con la plantilla actual se ven muy justos para dar una respuesta segura y de calidad.
Además, el recorte de un celador/a en el turno de noche les obliga, en ocasiones, a tener que realizar tareas de ese colectivo que no pueden demorarse por estar ocupado en otras tareas.
Por otra parte, el recorte de plantilla va a incrementar los problemas que se generan por el disfrute de derechos del trabajador/a como licencias por cuidados de familiares o asistencia a consultas médicas que dejan al servicio con menos personal por no cubrirse estas situaciones.
Por último, reivindicamos la necesidad de dotar al servicio de una auxiliar de enfermería por cada matrona y la recuperación del celador/a del turno de noche recortado con anterioridad que permita una atención continuada y personalizada a la usuaria, fomentando la sensación de seguridad e intimidad. Esto permitiría implantar un verdadero trabajo en equipo que permita un trabajo de calidad. Una calidad que se deteriorará de producirse el recorte de plantilla.
Barakaldo a, 6 de noviembre de 2018.
ESK ELA UGT CCOO LAB SAE
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