Pese a ello, los nacionalistas han decidido pagar aunque, paradójicamente, afirman que es "irregular" y "nulo de pleno derecho" el contrato que reconocía la propiedad de las esculturas en favor de la familia Echevarrieta, documento firmado por el exalcalde Alfonso García Alonso (PSE).
"El anterior alcalde, Alfonso García, firmó un contrato sin que mediase expediente alguno", afirman desde el Gobierno local (PNV), que no señalan que se vayan a emprender acciones contra el exmandatario por las consecuencias económicas de su acción.
Según los nacionalistas, el pago se ha realizado porque los herederos de Echevarrieta "amenazaban con llevarse las esculturas", amparándose en el contrato que el PNV dice que es "nulo de pleno derecho" y que prevé que se "podría resolver anticipadamente el contrato de comodato —cesión de las piezas de arte— si recibe una oferta para la compra de dichas obras".
Para efectuar el desembolso, el equipo de Gobierno ha pedido un contrainforme jurídico para desvirtuar el pronunciamiento del interventor, que considera que las esculturas ya eran propiedad del Ayuntamiento, sin necesidad de pagar los 50.000 euros.
Nota de prensa del equipo de Gobierno municipal (PNV)
Barakaldo ya puede decir (ahora sí) que la Finca Munoa es íntegramente propiedad de las y los barakaldeses
- El Ayuntamiento aprueba la compra por 50.000 euros de dos esculturas de la finca, que no se expropiaron en 2014
- El anterior alcalde, Alfonso García, firmó un contrato sin que mediase expediente alguno, en el que reconocía que las obras de arte eran de la familia Echevarría-Echevarrieta
El Ayuntamiento de Barakaldo expropió en 2014 la Finca Munoa; un espacio de más de 60.000 metros cuadrados de zonas verdes con un palacio de estilo imperio francés que llevaba oculto a las yos vecinos décadas. Su compra, realizada por el anterior equipo de gobierno supuso un coste de 15 millones de euros más un sobrecoste de 5 millones de euros de intereses, que las y los barakaldeses comenzaron a pagar en 2017. Sin embargo, el equipo de gobierno actual se topó hace más de un año con una nueva sorpresa inesperada, los herederos de Horacio Echevarrieta amenazaban con llevarse las esculturas ‘Eva y ‘Dama’ ya que, decían, no formaban parte de la expropiación.
Al poner en marcha la maquinaria para que estas joyas escultóricas no abandonaran los terrenos de la finca, el área de Fiscalización encuentra un contrato de comodato que el anterior alcalde socialista, Alfonso García, firmó con los herederos. Se trata de un contrato en el que se reconocía que la familia era propietaria de las esculturas y en el que se subrayaba que el Ayuntamiento cuidaría las obras de arte con compromiso de que las mismas permanecieran en la Finca.
Ese mismo contrato recogía que “el propietario solo podría resolver anticipadamente el contrato de comodato si recibe una oferta para la compra de dichas obras”, y según hicieron saber los herederos al Ayuntamiento, contaban con una oferta en Madrid, lo que aceleró el proceso de compra por parte del Ayuntamiento.
Un contrato nulo, sin expediente ni avales técnicos
Durante la preparación del expediente para la compra de estas obras de arte, el interventor municipal emite un informe en el que entiende que las esculturas ya son propiedad del Ayuntamiento ya que, a su parecer, forman parte del conjunto expropiado, y advierte de que el contrato firmado por García con los herederos es nulo de pleno derecho ya que no está avalado por ningún técnico municipal.
“Este acuerdo es una irregularidad manifiesta del anterior alcalde socialista ya que firma el contrato sin que medie decreto, ni acuerdo de junta de gobierno, ni acuerdo de pleno, que son las únicas formas de tomar decisiones plenas de derecho en el Ayuntamiento", ha explicado Danel Sola, concejal de Hacienda y Patrimonio.
Ante esta contradicción, con un documento nulo que reconoce la propiedad a los herederos y el informe de intervención interpretando la propiedad municipal de las esculturas, el equipo de gobierno solicitó a los servicios jurídicos del Ayuntamiento que aclarasen la duda sobre la propiedad.
En este sentido, los servicios jurídicos emiten un informe en el que entienden que “los bienes muebles que se expropian deben constar expresamente en el expediente expropiatorio” y continua diciendo que “los bienes muebles que formaban parte de la Finca Munoa en el momento de la expropiación, además de las esculturas son diversos y varios (mobiliario, documentación….) La mayor parte de ellos tienen una característica común, han desaparecido de Munoa. Incluso lo han hecho algunos (como chimeneas) que es dudoso que tuviesen carácter de bienes muebles y no formasen parte inseparable sin lesión del inmueble al que pertenecían".
“Es decir, que al expropiar la finca se expropió el continente, pero no el contenido”, ha explicado Sola.
En febrero de 2017 Gobierno vasco declaró Conjunto Monumental en febrero de 2017 a la Finca Munoa, por lo que es obligación del Ayuntamiento trabajar para su puesta en valor y velar por su conservación. “Hemos tenido que tomar esta decisión para garantizar que Barakaldo sea propietario único de la Finca y de lo que se encuentra en su interior y por fin podemos decir que Munoa es de las y los barakaldeses”, ha explicado el concejal de Patrimonio.
La compra supondrá una inversión de 50.000 para el Ayuntamiento. “La recuperación de la Finca Munoa para las y los vecinos de Barakaldo fue una gran noticia, pero la manera de ejecutar esa expropiación fue una auténtica chapuza. El anterior equipo de gobierno no protegió el contenido del palacio ni del jardín, lo que supuso la desaparición de los muebles, y de la gran mayoría de las chimeneas del palacio, que fueron arrancadas”, ha recordado Sola. “Vamos a hacer las cosas bien para blindar esta joya barakaldesa y evitar que Barakaldo vuelva a perder patrimonio”, ha concluido.
Las esculturas
-‘Eva’ realizada por Nemesio Mogrobejo. Es de bronce y tiene un coste de 35.000 euros.
-‘Dama’ realizada por Valentín Dueñas. Es de Piedra y tiene un coste de 15.000 euros.
Ambas esculturas fueron tasadas por un experto del Museo de Bellas Artes en 2014, y su precio quedaba recogido en el contrato de comodato firmado por el alcalde socialista Alfonso García. El presupuesto de este año ya contempla una partida de 50.000 euros para la adquisición de estas obras.
