• Cuestiona el funcionamiento de los servicios municipales de ayuda a la mujer maltratada •
Hay dos elementos que han conseguido que Argitan sea una organización conocida y reconocida en Barakaldo. Por un lado, su demanda continua durante casi dos décadas de un servicio municipal para el asesoramiento integral a la mujer. Por otro, su exitosa campaña de identificación de los “puntos negros” de la ciudad, en donde las barakaldesas tienen un riesgo extra de sufrir cualquier tipo de agresión. Este informe se ha convertido en un documento de trabajo que utilizan tanto organizaciones sociales como políticas. Sin embargo, Argitan sigue siendo un agente incómodo para las instituciones. Sus demandas no cesan.
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> 01/12/2014. La violencia machista sube con la crisis
La labor que desarrolla la asociación Centro Asesor de la Mujer Argitan en Barakaldo no resulta sencilla. Son algo más de 200 las integrantes de este colectivo que tiene como ejes centrales de actuación la reivindicación pero también la ayuda a las mujeres que necesitan asistencia psicológica, jurídica o sociolaboral.
Aunque hay un servicio municipal, lo cierto es que Argitan no da abasto con sus cuatro psicólogas, tres abogadas y tres orientadoras. Y la situación incluso se ha agravado. No es sólo que la mujer esté peor por la crisis, tanto económicamente como a nivel de seguridad, sino que la propia asociación ha visto cómo las aportaciones desde las instituciones públicas han caído un 75%.
Sin embargo, la portavoz del grupo, Karmele Ozaita Andrés, no suena pesimista al describir el estado de las cosas. Con seguridad, aunque no sirva de consuelo, ha vivido tiempos peores. De hecho, esta militante feminista transmite confianza en el futuro. Cree que los jóvenes, y específicamente las mujeres jóvenes, son conscientes de la realidad, de una sociedad que discrimina a la mitad de la población —la femenina— y que, por lo tanto, saben defenderse.
Largo plazo. Precisamente, recién celebrado el Día contra la Violencia hacia las Mujeres, Argitan tiene claro su mensaje: “La violencia contra la mujer es consecuencia de las desigualdades”. Por ello su trabajo tiene dos tiempos: el inmediato y el de plazo más amplio.
El que más le interesa es el largo, el que afecta a los jóvenes. Ahí, el trabajo pasa por la coeducación, formar en la corresponsabilidad, la prevención desde las redes y la busca de relaciones sanas de pareja en el espacio escolar y en la calle. Sin embargo, no es una cuestión sólo de menores. A corto plazo hay un trabajo para capacitar que debe llegar también a los representantes y empleados de servicios públicos locales. “Nos estamos dando cuenta de que hay una falta de formación sobre género, sobre todo en el mundo político más cercano, como en las propias concejalas y alcaldables”, explica Ozaita, que no olvida que en lo inmediato también es necesario ajustar a la realidad los recursos y los proyectos del Ayuntamiento.
Problemas. En política frente a la violencia machista es donde Argitan observa ya que hay dificultades con los servicios municipales. De hecho, hay dudas de que el asesoramiento se realice de manera permanente. La saturación que vive la asociación apunta a que el Ayuntamiento no tiene siempre personal disponible. Los datos del Observatorio de Violencia de Género de Bizkaia también alertan al respecto. No hay seguridad en cuanto a los datos de mujeres que han sido acogidas en el piso municipal acondicionado a estos efectos y el Ayuntamiento sólo facilita cifras de asistencia psicológica a maltratadas de un mes y medio para todo el año 2011.
A estas dudas sobre si existen realmente servicios municipales permanentes se suma el hecho de que la casa de acogida municipal de Barakaldo no es de urgencia, lamenta Argitan. En caso de agresión grave, la Er-tzaintza remite a la mujer a un centro de la Diputación en Bilbao.
Sin cobertura. Otra preocupación de la asociación es que el área de Mujer de Barakaldo sólo tiene un número de teléfono y funciona sólo en horario de funcionario. Así, Argitan no tiene seguridad de que las asesorías municipales para mujeres maltratadas estén funcionando de manera continua. De hecho, se da la paradoja de que la asociación recibe a personas que le remiten, no sólo Emakunde y la Ertzaintza, sino el mismo servicio municipal de atención al ciudadano (teléfono 010). Ni siquiera el juzgado de mujer funciona las 24 horas en Barakaldo aunque atiende a toda la comarca.
