Comunicado
COMUNICADO DE PRENSA
►El Alcalde de Barakaldo, Alfonso García, impide la apertura de un recurso de alimentación infantil durante el verano para los 300 menores que sufren malnutrición en la localidad.
►Según datos oficiales cerca de 300 menores de Barakaldo padecen malnutrición. Situación reconocida por diferentes instancias municipales, asociaciones locales, los servicios sociales y la totalidad de partidos políticos con representación en el consistorio.
►El pleno del Ayuntamiento exigió la apertura de un recurso asistencial para dar respuesta a esta situación durante el verano; al estar cerrados los comedores escolares de los colegios. Sin embargo, el Alcalde de Barakaldo se ha negado, finalmente, a su puesta en marcha.
►Además, hay que tener en cuenta que este pasado mes de julio el Alcalde de Barakaldo, Alfonso García, decidía vía Decreto (al fiel estilo Rajoy) recortar en un 50% la cuantía de las prestaciones a las que tienen derecho las familias de la localidad para hacer frente a sus necesidades más básicas: vivienda, alimentación, vestuario, gastos de comunidad, atención sanitaria…
►Por este motivo, y coincidiendo con la apertura del curso escolar en nuestro municipio, se instalarán a la entrada del Ayuntamiento de Barakaldo una serie de pupitres, pizarras y sillas de estudio; en los cuales se colocarán una decena de cubiertos y platos vacíos como forma de visualizar la situación que padecen estos 300 menores y cientos de familias de Barakaldo.
Pupitres y platos vacíos
Recientes estudios presentados por entidades como el Ararteko-Defensor del Pueblo han encendido la voz de alarma a cerca de la realidad de pobreza que están viviendo miles de niñas y niños. Concretamente se alerta a cerca de la situación de malnutrición que padece buena parte de la infancia. Se señala que en el País Vasco 16.000 menores de 15 años tienen problemas de subnutrición.
Realidad a la que no es ajena nuestra localidad. Así, 300 menores tienen problemas para acceder a una comida diaria y equilibrada. Situación que se ha visto agravada este verano coincidiendo con fin del curso y el cierre de los colegios y comedores escolares. Por este motivo diferentes agentes sociales solicitaron -a través de una moción- a las áreas de Acción Social y Educación del consistorio "dar los pasos necesarios para poner a disposición de la infancia barakaldesa un servicio que garantice la alimentación adecuada durante las vacaciones de verano" en los colegios de Larrea y Gurutzeta, periodo en el que no hay acceso a los comedores escolares.
Ante esta iniciativa el Alcalde de Barakaldo, Alfonso García, y su Equipo de Gobierno, reaccionaron reconociendo esta situación pero negándose a la puesta en marcha de un dispositivo que garantizara la alimentación de la población menor barakaldesa. Lo que ha motivado que este verano decenas de niños y niñas hayan tenido problemas para poder alimentarse de forma adecuada.
Por desgracia, esta no es una realidad aislada a estos menores. Hay que tener en cuenta que 4.000 personas se han acercado en lo que llevamos de año al Banco de Alimentos del municipio. Además, el comedor social de Cáritas atiende diariamente a 60 familias.
En defensa de los derechos y los servicios sociales.
Por desgracia, habilitar un servicio que garantice la alimentación de la infancia no soluciona las dificultades que padecen buena parte de los vecinos y vecinas del municipio. Hay que tener en cuenta que detrás de estos 300 menores existen familias y hogares con graves problemas para llegar a fin de mes.
Un avance significativo a este grave problema pasaría por ampliar las partidas presupuestarias destinadas a las “Ayudas Económicas Municipales”. Congeladas desde hace 4 años en 750.000 euros para una población de 100.000 habitantes.
Además, de dar marcha atrás en los “Decretos de Alcaldía de Minoración y Priorización” que suponen un recorte del 50% en las prestaciones a las que tienen derecho las familias de la localidad para hacer frente a sus necesidades más básicas: vivienda, alimentación, vestuario, gastos de comunidad, atención sanitaria…
A la par que pasa por extender y reforzar los servicios sociales municipales. Esto conllevaría una mejor gestión y atender con celeridad las situaciones de emergencia social que se producen a diario en la localidad. Hay que tener en cuenta que en Barakaldo se tarda en abonar las prestaciones sociales más de 7 meses entre la solicitud de la cita, la tramitación, resolución del expediente y el abono de la misma.
Hipocresía municipal ante el drama del paro y la pobreza
Así y todo, resulta curioso observar como el Ayuntamiento de Barakaldo se niega a poner en marcha medidas concretas para hacer frente al drama de la malnutrición infantil en el municipio mientras organiza campañas mediáticas de recogida de alimentos para garantizar a la infancia de la localidad el acceso a un desayuno adecuado o al necesario material escolar.
Esto demuestra la hipocresía del actual “Equipo de Gobierno”. El cual recorta prestaciones sociales mientras dice interesarse por la situación de pobreza que padecen cientos de familias brakaldesas.
Así, a lo largo de los últimos meses estamos asistiendo a diversos actos públicos donde el consistorio realiza una serie de iniciativas que apelan a la solidaridad de los vecinos y vecinas con el ánimo de hacer frente a esta realidad social. Queda claro que todo ello sólo se realiza desde la corporación municipal con claros fines electoralistas y con los que rascar un puñado de votos.
El Ararteko reconoce la existencia de casos de "subnutrición" infantil
En su último informe el Defensor del Pueblo-Ararteko reclamaba una estrategia global para hacer frente a la pobreza infantil en Euskadi, un fenómeno creciente por el impacto y la persistencia de la crisis económica. Así, ante el Parlamento Vasco, Íñigo Lamarca, ponía de manifiesto un aumento de los menores con una dieta pobre o poco equilibrada en Euskadi, situación en la que podrían encontrarse 16.000 menores de 15 años.
Además, el Ararteko señaló en sede parlamentaria que la mayoría de los expedientes que tramitó su oficina tuvieron relación con quejas contra los recortes en los derechos referidos a educación, sanidad, prestaciones sociales y vivienda. Quejas que suponían un incremento del 15% en comparación al curso pasado.
Datos a los que debemos sumar los aportados por la “Oficina de la Infancia y la Adolescencia”. Así, este recurso asistencial recibió el pasado año 520 quejas; la mitad de ellas eran denuncias por la situación de pobreza que sufren muchos menores en Euskadi.
