fotos: Koldo Llorente
Discurso de Basagoiti
Vamos a unas elecciones cruciales. Lo son porque algunos quieren echar por tierra logros esenciales de los vascos. Algunos quieren desbaratar siglos enteros de convivencia, de trabajo, de esfuerzo, de posición de delantera dentro de España.
Los vascos nos hemos caracterizado siempre por trabajar duro, por poner en pie proyectos, por emprender pese a las dificultades, por saber llegar a acuerdos, por ser líderes dentro de España. Los vascos hemos sido siempre fiables, respetados y admirados.
Barakaldo, Vizcaya, Euskadi es una tierra amable, pujante, una referencia de seguridad y confianza. Dentro de España y fuera también. Hasta la fecha, sólo los crímenes habían manchado el expediente de los vascos. Sólo la acción programada y continuada de ETA había perjudicado nuestra imagen.
Ahora el PNV quiere poner todo eso en riesgo y quiere hacerlo en el peor momento. En la peor crisis económica en decenios.
Los planes de independencia del PNV resuelven muchas dudas a las empresas vascas. Pero las resuelven por la vía rápida. Las resuelven dando un portazo y ayudando a que se busquen lugares más tranquilos.
Y esos planes también resuelven muchas dudas a los vascos que con muchas dificultades están aguantando su negocio y quieren salir adelante. Esos planes del PNV se llevan por delante a muchos emprendedores. La independencia del PNV empuja a cerrar muchas persianas.
La independencia del PNV se va llevar por delante a muchas empresas. Porque con toda lógica nadie quiere arriesgar en medio de un escenario de tanto rechazo y tan incierto. Si el PNV tiene mayoría política y manos libres para tirar por ese camino, se van a bajar muchas persianas en Euskadi.
No nos engañemos y seamos realistas. El pacto por la ruptura con España en el que están PNV y CiU espanta la inversión. Nos han colocado ya el cartel de dudosos. Porque nadie quiere arriesgar entre broncas y entre líos políticos.
La inversión busca seguridad, busca terrenos de estabilidad política y busca tranquilidad. Los planes de independencia del PNV y de Cataluña sólo producen incertidumbre y confusión. Y ese precio lo estamos pagando ya.
Los planes de independencia del PNV barren las expectativas de la economía vasca. Dejan a las empresas vascas tiradas en la cuneta. Nos borra del mapa de los países importantes.
Es imposible competir de igual a igual con quienes cuentan con un paraguas político infinitamente más fiable que el de la independencia que pretende el PNV. Esos planes nos condenan a ser un país pequeño y aislado en el mundo.
El PNV está metiendo el miedo en el cuerpo a quienes ya tienen bastantes problemas para sacar su empresa adelante. Está metiendo el miedo en el cuerpo a quienes tiene la responsabilidad de tirar del carro.
Pero el próximo 21 de octubre tenemos la oportunidad de cambiar algunas cosas. Tenemos la oportunidad de influir y condicionar el futuro político de Euskadi. Apoyando la alternativa del Partido Popular que apuesta por un escenario de estabilidad y de equilibrio político.
El Partido Popular tiene un proyecto distinto para el País Vasco, una propuesta que cuenta con todos los vascos sin exclusión alguna. Un proyecto diferente, integrador, que reconoce la pluralidad social que conformamos los vascos, y que sabe que está decidido a defender la posición de Euskadi dentro de España y de Europa.
Euskadi se tiene que construir sobre la ilusión y no desde la resignación. Se tiene que construir sin imposiciones y respetando las distintas identidades que representamos los vascos.
Creyendo en nuestras posibilidades, con respaldo político y aprovechando el prestigio y el reconocimiento que nos hemos ganado a lo largo de nuestra historia.
Porque cuando tenemos la oportunidad de sumar, no queremos restar. Porque no queremos una Euskadi pequeña, alejada del mundo, aislada y sin posibilidades de crecimiento.
Yo pido el voto de todos los vascos que quieren apartarse de los follones y lo líos a los que nos lleva la independencia del PNV;
Pido el voto de los vascos que defienden la estabilidad política y la tranquilidad, a los vascos que creen en nuestras posibilidades;
pido el voto de los vascos que tienen ilusión para seguir haciendo de Euskadi una referencia económica fiable y respetada.
El próximo 21 de octubre los vascos tenemos la oportunidad de decidir nuestro futuro. Tenemos la oportunidad de parar la independencia que nos quiere imponer el PNV.
No queremos que nadie nos imponga un traje que nos perjudica y que nos deja en la orilla del progreso. Y esa oportunidad tenemos que aprovecharla.