Santamaría, en el coche que ocupaba, antes de que lo retirara la policía. Foto: Erlantz Sánchez
El barakaldés Luis Miguel Santamaría, de 52 años de edad, ha tenido que pasar en la calle después de que la policía retirara ayer el coche abandonado donde dormía con su hijo de 18 años y tras la negativa de la guardia urbana de Sestao a permitirle permanecer en las dependencias policiales. Así lo ha denunciado la plataforma contra la exclusión social Berri-Otxoak, que ha advertido de que los Ayuntamientos de Sestao y Barakaldo ni proporcionan ayuda a esta familia y ni siquiera se han interesado por su estado.Archivo |
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Luis Miguel Santamaria, de 52 años, y su hijo de 18 años, llevaban desde finales del mes de agosto viviendo en un coche. Ayer a la tarde la grúa municipal de Sestao retiró el coche donde vivían. Esta medida les ha condenado a dormir en la calle. Producto de esta actuación, además, se han quedado sin mantas ni ropa, que estaban dentro del vehículo.
Como solución, Luis Miguel Santamaria, ha intentado pasar las primeras horas de la noche en las dependencias de la Policía Municipal de Sestao con la intención de resguardarse de lo más crudo de la noche. Para ello ha entrado en las dependencias municipales para negociar su estancia en la comisaria con los policías que en ese momento estaban de turno. Su respuesta ha sido expulsarle de la comisaria sin darle ninguna otra alternativa.
Vecino de Barakaldo de toda la vida, además su hijo estudia en un instituto de Barakaldo, esta viendo como ambos consistorios de la Margen Izquierda se pasan la pelota entre uno y otro, sin darle ninguna solución. Además, ningún responsable de ambos ayuntamientos, ni desde los servicios sociales, se han puesto en contacto con él para ofrecerle una alternativa a dormir en la calle o una respuesta a su solicitud de ayuda; ni siquiera para interesarse por su persona.
Esta es la política social que se gastan ambas instituciones: recortes sociales y nula sensibilidad hacia las familias que peor lo están pasando por culpa de la actual crisis económica.
Hay que recordar que el Ayuntamiento de Barakaldo, como reconoció el propio Departamento de Acción Social, tiene paralizados desde mayo los expedientes de 1.530 familias que han pedido una ayuda social al consistorio fabril, sólo se ha atendido el 73% de las solicitudes. Así y todo, las familias que han recibido la asignación económica han visto como se le recortaba en un 50% "por motivos presupuestarios".
Otro tanto ocurre en Sestao, donde el dinero para ayudas sociales se agotó en mayo –aún con el recorte, que aplicó el equipo de gobierno, de un 20% en la asignación económica a conceder a las familias-. Las nuevas partidas presupuestarias no garantizan que se pueda atender todas las peticiones. Se prevé que sólo lleguen al 75% de las peticiones.
BERRI-OTXOAK
(PLATAFORMA CONTRA LA EXCLUSIÓN SOCIAL y POR LOS DERECHOS SOCIALES)
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