La "mala hostia" del alcalde

El alcalde, entre el secretario y el interventor, durante un pleno

No es la primera vez que el alcalde, el socialista Tontxu Rodríguez, demuestra su desgana durante la celebración de los plenos municipales, pero en la última sesión ordinaria el mandatario sí ha destacado por su actitud bronca respecto a la oposición, a la que negó al menos en tres ocasiones la palabra —llegó a impedir una intervención después de haberla autorizado— y a la que dedicó algunas expresiones como "mala hostia". Una de las principales afectadas, la portavoz del PP, Amaya Fernández, señalaba tras la reunión que había sentido "vergüenza ajena" y sostenía que Rodríguez "está incapacitado para dirigir el pleno" con su actitud "reprobable" y "hasta grosera". El malestar en la oposición era generalizado al final del pleno.