Agentes de la Ertzaintza detuvieron ayer a un hombre de 51 años en el Parque de Los Hermanos al que sorprendieron vendiendo heroína por lo que ha sido acusado de un delito de contra la salud pública. El detenido tenía diez envoltorios con droga y había ya sido detenido en trece ocasiones.Nota de prensa
Dos detenidos en Barakaldo y Sestao por tráfico de drogas
Agentes de la Ertzainetxea de Sestao detuvieron en la jornada de ayer, miércoles, a dos varones de 51 y 32 años de edad respectivamente, como presuntos autores de un delito contra la salud pública. El primero fue sorprendido vendiendo heroína en la vía pública y el otro arrestado traficaba con hachís en el bar que regentaba.
Servicio de Prensa
Sobre las cuatro y media de la tarde, una patrulla no uniformada de la Policía Vasca observó en el parque de Los Hermanos de Barakaldo cómo un individuo entregaba un envoltorio de plástico a otro varón recibiendo a cambio un billete de diez euros. De inmediato, ambos se separaron tomando diferentes direcciones siendo interceptados por los agentes. Estos comprobaron que se trataba de una dosis de una sustancia en polvo de color marrón, presumiblemente heroína, incautando además al presunto vendedor otros diez envoltorios con el mismo contenido, por lo que fue detenido. El arrestado, de 51 años de edad, presenta otros trece arrestos anteriores.
Sorprenden al camarero de un bar vendiendo hachís
Por otro lado, alrededor de las nueve de la noche fue detenido el camarero de un bar ubicado en el barrio de La Iberia de Sestao, tras ser sorprendido vendiendo hachís a un cliente del local. Alrededor de las diez de la mañana agentes de la ertzainetxea de dicha población vizcaína que participaban en un dispositivo de vigilancia establecido en la zona, fueron testigos de cómo se producía un posible intercambio de sustancias estupefacientes entre el empleado de un local y un varón que había accedido instantes antes al mismo. Cuando el supuesto comprador abandonaba el bar los ertzainas procedieron a identificarle, comprobando que portaba una bola de hachís que según se pudo verificar le había vendido la persona que regentaba el bar señalado. En el interior del establecimiento, oculta en la parte trasera de una tragaperras, se localizó una tableta de hachís de unos 100 gramos. Ante esta situación se procedido acto seguido a la detención del supuesto traficante.
