El PNV sufrió en la madrugada de ayer el más grave de los seis ataques que ha padecido en esta campaña. Un artefacto compuesto por líquido inflamable, aerosoles y cohetes pirotécnicos estalló ante la puerta del batzoki (sede social peneuvista) del barrio de Cruces, en Barakaldo (Vizcaya). La explosión causó múltiples daños en el local y en tres vehículos. Sigue leyendo