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El 67% de los vascos respiran aire contaminado según un estudio de Ecologistas en Acción

Un 67% de los vascos respiran aire contaminado según el estudio sobre la calidad del aire elaborado por Ecologistas en Acción que resalta que el principal contaminante que afecta a Barakaldo es el dióxido de nitrógeno (NO2) que se ha asociado con un incremento en las enfermedades respiratorias crónicas. En su informe, Ecologistas en Acción señalan sobre Euskadi: “Es de destacar la manera tan desordenada y dispersa en la que se han proporcionado los datos de Euskadi, hasta el punto que resulta difícil imaginar una manera más complicada de proporcionarlos. Cerca del 67% de los vascos respira aire contaminado. El contaminante principal son las PM10, pero el NO2 también está presente afectando a más de un 26% de la población. El NO2 afecta exclusivamente a la ciudad de Bilbao y de Barakaldo. Destacan algunos puntos de Guipuzcua (Zumárraga) y Vizcaya (Arrigorriaga, Erandio y Santurce) con superaciones del valor diario de PM10 en más de 70 días (más del doble del permitido); pero sobre todo una de las estaciones de Amorebieta (Zelaieta) y dos de Bilbao (Zorroza Matadero y Larraskitu) con superaciones respectivas de 98, 161 y 122 días del valor diario permitido”. La contaminación atmosférica causa daños a la salud de los ciudadanos y al medio ambiente. Su origen se encuentra en las emisiones originadas por las industrias, las calefacciones y en particular por el tráfico que es el responsable del 80% de la contaminación atmosférica, principalmente en las grandes ciudades y áreas metropolitanas. El informe señala: “Según datos del Ministerio de Medio Ambiente, la contaminación del aire cuesta la vida de 16.000 personas al año en todo el Estado, más de cuatro veces que las producidas en accidentes de tráfico, y no se aprecian mejoras con respecto a otros años, si acaso lo contrario. El contaminante más problemático son las partículas en suspensión (PM10): un 48% de la población respira niveles excesivos de este contaminante. Después habría que destacar el dióxido de nitrógeno (NO2), que afecta al 21% de los ciudadanos, en especial en las grandes ciudades. Y, por último, el ozono (O3) que se ceba en las áreas rurales y periurbanas próximas a las grandes poblaciones”. “La contaminación atmosférica incide en la aparición y agravamiento de enfermedades de tipo respiratorio, así como otras asociadas, como las vasculares y los cánceres. En España, según el Ministerio de Medio Ambiente, se producen 16.000 muertes prematuras al año relacionadas con la contaminación atmosférica. Sirva como referencia de la magnitud del problema el hecho de que en España la cifra de muertes debida a los accidentes de tráfico en el año 2006 fue de 4.104 personas. Es decir, en España a causa de la contaminación del aire fallecen 4 veces más personas que por los accidentes de tráfico”. “Entre aquellos contaminantes más problemáticos que se respiran en las ciudades destacan el dióxido de nitrógeno (NO2), las partículas en suspensión (PM10), el ozono troposférico (O3), o el dióxido de azufre (SO2)”. “Los óxidos de nitrógeno son en general muy reactivos y al inhalarse afectan al tracto respiratorio. El NO2 afecta a los tramos más profundos de los pulmones, inhibiendo algunas funciones de los mismos, como la respuesta inmunológica, produciendo una merma de la resistencia a las infecciones. Los niños y asmáticos son los más afectados por exposición a concentraciones agudas de NO2. Asimismo, la exposición crónica a bajas concentraciones de NO2 se ha asociado con un incremento en las enfermedades respiratorias crónicas, el envejecimiento prematuro del pulmón y con la disminución de su capacidad funcional”. “Hoy día los científicos consideran que las partículas en suspensión son el problema de contaminación ambiental más severo, por sus graves afecciones al tracto respiratorio y al pulmón. Las PM10 están detrás de numerosas enfermedades respiratorias, problemas cardiovasculares, y cánceres de pulmón. Por otro lado, los estudios sobre su efecto a largo plazo han estimado que la exposición a partículas en suspensión puede reducir la esperanza de vida entre varios meses y dos años. Según un estudio de la Comisión Europea, publicado a comienzos de 2005, la presencia de estas partículas en la atmósfera produce cada año 350.000 muertes prematuras”. “La exposición crónica al SO2 y a partículas de sulfatos se ha correlacionado con un mayor número de muertes prematuras asociadas a enfermedades pulmonares y cardiovasculares. El efecto irritativo continuado puede causar una disminución de las funciones respiratorias y el desarrollo de enfermedades como la bronquitis”. “Ecologistas en Acción ha venido denunciando de forma reiterada las superaciones de los valores límite desde el año 2002, cuando entró en vigor la normativa actual, así como la inactividad por parte de los Ayuntamientos y Comunidades Autónomas, para atajar este gravísimo problema de salud pública”. “se calcula que el 80% de la contaminación que sufren la mayoría de las áreas urbanas se debe al tráfico, y mayoritariamente al coche. Lo que hay detrás de este incremento de la contaminación atmosférica son unas políticas de transporte y urbanismo desastrosas, encaminadas a fomentar el uso del vehículo privado, promoviendo la proliferación de infraestructuras viarias y una gran ocupación del espacio público, todo ello en detrimento de un impulso real a los modelos de transporte públicos. El resultado de estas políticas es que entre 1990 y 2003 el crecimiento del transporte por carretera en España fue de un 91%, y el número de kilómetros recorridos per cápita en el mismo periodo se incrementó un 78%. Es necesario recordar que, además de la contaminación atmosférica, el coche es responsable de otros impactos medioambientales como la emisión de gases invernadero o el ruido”.