Más de 270 deportistas completan con éxito y ambiente festivo la segunda edición de Underrun
- La singular carrera de casi ocho kilómetros por las vías de Metro Bilbao, entre las estaciones de Moyua y Ansio, insufló vida nocturna a los túneles del suburbano
- El director gerente de Metro Bilbao, Eneko Arruebarrena, y la alcaldesa de Barakaldo, Amaia Del Campo, ejercieron como anfitriones en la salida y llegada respectivamente
- Personalidades del deporte como Eneko Van Horenbeke, Carmen Estéfano, Aitor Larrazabal o Begoña Beristain sirvieron de liebres a los distintos grupos de participantes
- La inscripción solidaria permitió recaudar más de 4.400 euros que serán donados a la asociación Haszten
Apenas faltaba media hora para que el reloj alcanzara la medianoche cuando todas las personas que iban a participar en la segunda edición de Underrun se montaban en el tren habilitado para llevarlas desde Ansio a Moyua. Era el viaje de ida. La vuelta tocaba hacerla corriendo. Por las vías. En ellas radica, precisamente, el atractivo de Underrun, la prueba atlética más singular del calendario. Finalmente fueron 275 deportistas quienes pudieron completar con éxito y un gran ambiente festivo los casi ocho kilómetros de recorrido entre ambas estaciones.
El director gerente de Metro Bilbao, Eneko Arruebarrena, fue el encargado de activar el pulsador que dio inicio a la fiesta deportiva por los túneles del suburbano. El popular rostro televisivo Eneko Van Horenbeke, por su parte, fue quien comandó al primero de los 11 grupos en los que fueron distribuidas las personas participantes. Personalidades del deporte como Carmen Estéfano, Aitor Larrazabal, Begoña Beristain o Joseba Iraola erjecieron también como liebres.
Pasada la 1:00 de la madrugada, todos los grupos habían salido ya de Moyua en dirección hacia Ansio, donde unos cuantos minutos después llegaban ya los primeros corredores. Aunque la prueba no tenía espíritu competitivo, hubo participantes que se la tomaron muy en serio y, pese a la complejidad del trazado, completaron en algo menos de una hora los 7,8 kilómetros del recorrido. En la meta aguardaba la alcaldesa de Barakaldo, Amaia Del Campo, quien hizo entrega de medallas simbólicas a quienes acabaron la carrera. A todas las personas inscritas en realidad, porque la mejor noticia fue que no se registraron accidentes ni lesiones de consideración.
Una vez en Ansio, las personas participantes tuvieron la oportunidad de reponer fuerzas, mientras el personal voluntario de Metro Bilbao devolvía a las vías su aspecto habitual para el normal desarrollo del servicio de hoy. Como ya sucediera en la primera edición, la carrera tenía vocación benéfica y, gracias a la inscripción, permitió recaudar más de 4.400 euros que próximamente serán donados a la asociación Haszten, dedicada a impulsar el deporte inclusivo y adaptado.