Los hechos ocurrieron el 7 de septiembre pasado, cuando la mujer intentó utilizar su coche pero descubrió que había otro vehículo aparcado y bloqueando la salida del garaje, en la calle Castilla-La Mancha. El conductor del segundo turismo había estacionado en el lugar "por la información errónea (no actualizada) facilitada por el Servicio de Atención Ciudadana y recabada del departamento de Servicios Municipales en el mismo día de los hechos". Ante esta situación, la vecina tuvo que llamar a un taxi.
El Ayuntamiento ha reconocido su responsabilidad y ha acordado "abonar la indemnización por la utilización de un taxi debido a que el vado de su garaje estaba obstaculizado por un vehículo al que se le había facilitado por el Ayuntamiento un horario erróneo del el horario de dicho vado".