El proyecto de viviendas temporales del BEC ha sido objeto de polémica desde sus inicios. Elkarrekin Barakaldo, coalición formada por Podemos, Ezker Anitza-IU, Equo-berdeak e independientes, ya calificó estos ‘minipisos’ como ‘broma pesada’, por tratarse de viviendas de hasta 30 metros cuadrados con alquileres a partir de los 625 euros.
Ante la aprobación definitiva del proyecto, la coalición recuerda que, tras su denuncia, la promotora modificó la denominación de la operación, pasando de ‘apartamentos de servicios’ a ‘hoteles apartamento’. “Nos hace sospechar que la empresa está buscando una manera de evitar la Ley de Vivienda, tratando de camuflar viviendas por apartahoteles. Por eso solicitamos que se vigile el cumplimiento de la Ley y se cerciore que se tratará de un apartahotel y no de ‘minipisos’, ha reclamado su portavoz Itziar Celis.
En el Pleno, la coalición, junto a EhBildu, también ha presentado una enmienda a la totalidad para solicitar ‘dejar sobre la mesa’ el nuevo Plan Especial de Ordenación Urbana del barrio. Antes de su aprobación, Elkarrekin pide que se aclaren cuestiones como su viabilidad con costes actualizados o un peritaje externo del proyecto, independiente al propio ayuntamiento, entre otros.
De nuevo de la mano de su portavoz, la coalición ha afirmado que el proyecto presentado no plantea ningún valor añadido, pero sí muchas dudas. “Debemos plantearnos las necesidades reales de Barakaldo y qué queremos para nuestra ciudad. Debemos dejar de parchear el PGOU y trabajar en uno nuevo”, ha afirmado Itziar Celis. “La impresión es que este proyecto se trae atropelladamente debido a los fracasos en Lutxana en esta legislatura, como Sefanitro o El Calero, que han acabado judicializados. Y, posiblemente, el PERI 05 Lutxana-Burtzeña corra la misma suerte”, ha concluido la edil.
En nombre de asociaciones vecinales, sociales y ecologistas de Lutxana, Elkarrekin Barakaldo, junto a EhBildu, también ha avalado una moción solicitando que las empresas Oxinorte y Bilbaína de Alquitranes se trasladen fuera del barrio para ubicarse en zonas no residenciales. Tal y como aclara su coportavoz Christian Bolaños, estas industrias, atendiendo a la normativa vigente, están calificadas como ‘fábricas que manipulan elementos peligrosos’ y deben estar ubicadas fuera de los núcleos urbanos. “Se trata de una apuesta ambiciosa para un Barakaldo más seguro y sostenible, que no ponga en riesgo ni la salud de su ciudadanía ni su medioambiente”, ha aclarado el edil.
